Ureña ha asegurado que los bienes sacros tienen que volver a Aragón porque son suyos

Tras su renuncia el arzobispo de Zaragoza ha dicho que le hubiera gustado solucionar el conflicto.

Bienes religiosos en el Museo de Lérida
Ureña ha asegurado que los bienes sacros tienen que volver a Aragón porque son suyos
J.C.A.

El arzobispo de Zaragoza, Manuel Ureña, ha asegurado este miércoles que los bienes religiosos aragoneses depositados en el Museo Diocesano de Lérida "tienen que volver a Aragón", porque son suyos, y ha reconocido que le hubiera gustado dejar resuelto este asunto antes de renunciar a su cargo por motivos de salud.


Por ello, ha pedido a las instituciones aragonesas que sigan teniendo "paciencia" y los reclamen porque esos bienes "tienen que volver a Aragón", de donde son, ha dicho, pese a que la titularidad sea de la Iglesia.


Ureña, quien este miércoles ha comparecido en rueda de prensa para anunciar que renuncia al cargo de arzobispo de Zaragoza que ostenta desde hace nueve años por motivos de salud, ha señalado que a cualquier obispo le hubiera gustado dejar solucionado el conflicto de los bienes, porque "clama al cielo".


"La cosa reclamada a su dueño", ha añadido Ureña, quien ha recordado que la Santa Sede "por activa y por pasiva, con sentencias de diferentes instancias", ha ratificado que los bienes de las parroquias de Barbastro-Monzón "pertenecen a sus pueblos", fallos que se le han comunicado a la diócesis de Lérida, que "no da un paso" para su devolución, ha recordado.


Corresponde, por tanto, que según estos acuerdos, los bienes se devuelvan, ha insistido Ureña, quien ha subrayado que se intenta evitar convertir esto "en un caso de guerra" y se confía en que, en una sociedad civilizada, por el principio del derecho, "vuelvan (los bienes) a su casa".