Localizan y envían a prisión al exmilitar que huyó con el Gordo

No se presentó al juicio por apropiación indebida y la Audiencia de Zaragoza dictó una orden de busca y captura contra él

El exmilitar Luis Alberto V. P., al que su expareja denunció por apropiarse de los 400.000 euros con que fueron agraciados en un sorteo de la lotería de Navidad , se encuentra ya en la prisión de Zuera.La Audiencia Provincial empezó a juzgar al joven –para el que se piden dos años de cárcel– el pasado día 6, pero como llegó tarde, el juicio no pudo concluirse y se decidió continuarlo al día siguiente. Sin embargo, el acusado ni siquiera se presentó, lo que obligó al tribunal a dictar una orden de busca y captura.


Según pudo saber este periódico, las fuerzas de seguridad consiguieron dar finalmente con el paradero del fugitivo esta semana, por lo que automáticamente fue conducido al centro penitenciario de Zuera. Sin embargo, ayer se celebró una vistilla en la Audiencia de Zaragoza para decidir si debía continuar entre rejas hasta que vuelva a señalarse una fecha para concluir la vista oral. Y, teniendo en cuenta los precedentes, los magistrados optaron porque siga en Zuera. En cualquier caso, parece que el juicio podría reanudarse la próxima semana.Se autoinculpó el 6 de octubre

Luis Alberto V. P. desarmó a su propia defensa al confesar durante la primera sesión del juicio por apropiación indebida que cuando se marchó con un décimo de la lotería de Navidad agraciado con el gordo ya había roto con su hasta entonces pareja y que a esta no le correspondía ninguna parte del premio. Su propio abogado tuvo que explicar al tribunal que su cliente había cometido "un error" al manifestar que la relación entre ambos se había quebrado, ya que de lo contrario el acusado podría acabar condenado e ingresando en prisión.


Y ¿por qué le pueden costar estas palabras al acusado la prisión? Porque la Fiscalía entendía que, tras más de cinco años de convivencia, la relación de esta pareja podía equipararse a la de un matrimonio, y en el seno de este no cabe reproche penal para ninguno de los cónyuges cuando entre ambos se acusan de un delito de apropiación indebida. El Ministerio Público pedía por ello la absolución del exmilitar , con la única obligación de que este abonara a su exnovia los 200.000 euros que le correspondían del premio.


Sin embargo, al reconocer él mismo que ya habían roto cuando se celebró el sorteo, a la Fiscalía no le quedó otro remedio que solicitar al tribunal que de forma alternativa se condene al imputado a dos años de prisión.