Menos Whatsapp y más formación contra pederastas

Tras la denuncia del intento de secuestro de un niño en Zuera, una oleada de mensajes con información errónea y sin contrastar inundan las redes sociales. Un experto que da charlas en colegios llama a la cordura

Fernando Pérez Barreras da formación sobre protección en los colegios a niños y padres.
Menos Whatsapp y más formación contra pederastas
Francisco Jiménez

El pasado 26 de septiembre se denunció un intento de secuestro en Zuera. Al parecer, unos desconocidos trataron de llevarse a un niño de 11 años cuando salía del colegio animándole a subir a su vehículo, pero el chaval desconfió y salió corriendo. Aunque este ha sido el único caso de intento de rapto a un menor puesto en conocimiento de la Guardia Civil, la noticia ha desatado una cadena interminable de bulos a través de las redes sociales que han tenido en vilo a cientos de padres y profesores durante días. 


Miles de mensajes de Whatsapp han saltado de móvil a móvil, dando crédito a una supuesta e irreal oleada de intentos de secuestros en la capital y el entorno metropolitano. San Mateo de Gállego o Villanueva son dos de las localidades en las que se ha desatado una psicosis sin precedentes. Algunos mensajes ubicaban allí a los secuestradores, otros aseguraban que los intentos de rapto eran constantes e incluso algunos llegaron a dar una descripción detallada del supuesto pederasta con fotografía incluida. Según ha podido saber HERALDO, el hombre de la imagen nada tiene que ver con estos episodios. 


La Guardia Civil se ha cansado de decirlo: "Las noticias reales se dan por los canales oficiales". Pero el miedo es muy mal compañero, y la fiebre de estos rumores ha sido irrefrenable. El caso real y los avisos dados por la población han sido investigados por el Equipo de Mujer y Menores (Emume) de la Guardia Civil, y la Policía Local ha estado controlando las entradas y salidas a colegios. No se han hallado evidencias de otros casos ni ha habido más denuncias.


Ahora, los expertos piden a la población que ponga en cuarentena este tipo de noticias en las que, por supuesto, se desconoce la fuente. Uno de ellos es Fernando Pérez Barreras, diplomado superior en Criminología, quien lleva meses volcado en una misión: ofrecer a los padres y a los niños información y herramientas para hacer frente a posibles casos de secuestros y abusos. También les forma en autoprotección en caso de accidentes o incendios y, si son adolescentes, informa sobre las drogas. 


"Lo que hemos vivido en Zaragoza tras el intento de secuestro de Zuera ha sido una locura. Algunos mensajes localizaban al supuesto pederasta en Cuarte o en Cadrete, y pocos acudían a las fuentes autorizadas y fiables, como son los cuerpos de seguridad", explica. 


Su vocación en este sentido surgió hace unos meses, cuando el pederasta de Ciudad Lineal empezó su oleada de abusos y raptos exprés a niñas madrileñas. Entonces, Fernando se dio cuenta de que ni esas pequeñas ni muchos otros niños estaban preparados para no ser engañados. "El pederasta las observaba durante días, incluso cuando estaban con sus padres. Luego las llamaba por su nombre y las convencía para llevarlas a algún sitio", explica este profesional. "Y haciendo la prueba, en mi entorno, me di cuenta de que un niño de 10 años duda de qué hacer cuando alguien le llama por su nombre y parece de fiar. Eso me asustó mucho y decidí hacer algo", explica.


Desde entonces, Fernando utiliza todo su tiempo libre (que no es mucho) en dar charlas gratuitas en colegios. En el caso de los niños, ha elaborado materiales adaptados a cada edad en los que les enseña qué hacer y, sobre todo, qué no hacer cuando alguien intenta manipularlos.Reglas claras y concisas

"Les enseño que los valientes de verdad dicen ‘no’. También unas reglas claras y concisas sobre cómo actuar", concreta. Por ejemplo, qué hacer si alguien les llama desde algún coche a la entrada o la salida del cole; o incluso si ya les ha cogido. "En estos casos es mejor gritar diciendo que esa persona no es tu padre o que te quiere llevar que solo chillar, ya que pueden pensar que es una rabieta", dice.


Uno de sus caballos de batalla es lograr que los padres aprendan también cómo actuar y sepan cómo orientar a los hijos. "La comunicación con el niño es fundamental, que el pequeño tenga confianza para hablar sin miedo a no ser escuchado o ser reprendido", explica. A veces, una opción efectiva es que los progenitores tengan distintos roles, y que uno se muestre más firme y otro más cómplice.