Un 14% de los menores del Casco Histórico presentan obesidad y desequilibrio alimentario

Un estudio de la Caixa aclara que no sufren desnutrición pero insiste en "educar" a las familias.

Rueda prensa en la que se han expuesto los problemas alimenticios de los niños de las familias del Casco Histórico
Un 14% de los menores del Casco Histórico presentan obesidad y desequilibrio alimentario
Ayuntamiento de Zaragoza

Los menores de las familias más vulnerables del Casco Histórico de Zaragoza presentan problemas de desequilibrio alimentario y obesidad, pero no de desnutrición, según revela un estudio de la Obra Social 'la Caixa' realizado en colaboración con el Ayuntamiento de la capital aragonesa. 


Este I Estudio de Alimentación Infantil en el Casco Histórico de Zaragoza tiene como objetivo mejorar la atención a la infancia con problemas de alimentación y ayudar y formar a las familias en dificultad social. 


El estudio arranca de las historias clínicas de todos los niños del Centro de Salud de San Pablo de los últimos 8 años y ha analizado datos de 4.353 menores de 2 a 14 años, de los que el 49% son niños y el resto niñas. 


Uno de los datos que extrae el informe revela que la obesidad entre los menores de San Pablo es de un 14% y "en algunos casos" las familias de estos menores también presentan obesidad, según ha informado el coordinador del programa Zaragoza-Redistribuye, Jesús Alquézar. 


Al respecto, ha apostillado que "se observa, sobre todo, una mala alimentación de los menores allí donde no existen hábitos en el hogar, no hay una alimentación sana y equilibrada, ni unos horarios adecuados y prefijados de comida". Por ello, una de las principales recomendaciones es que la familia "al ser la unidad principal responsable de la alimentación de los niños, sea el centro del trabajo para mejorar la salud de la comunidad". 


En rueda de prensa, ha desglosado el contenido del informe para destacar que este desequilibrio en la alimentación "se debe a un exceso y a la tipología de nutrientes" para agregar que "hay una mala nutrición y no desnutrición". 


Las causas de la obesidad radican en que las lactancias maternas son poco prolongadas; hay un bajo consumo de productos frescos, sobre todo vegetales; un exceso de consumo de productos manufacturadas y además ricos en grasas saturadas; y dificultades para hacer deporte. Este último es uno de los puntos recomendados para que los menores dejen de la lado la obesidad.Educación


El estudio concluye, del análisis de los menús de los comedores escolares, que "se aproximan bastante a las recomendaciones de calidad, aunque con aspectos que se han de mejorar".


Así, se considera bien valorado que se ofrezcan verdura y hortalizas seis veces al mes; precocinados tres veces al mes; salchichas y albóndigas una vez a la semana; frutas cuatro veces a la semana; y legumbres una vez por semana. Además, se ha detectado que los colegios en los que come con mayor calidad son los que disponen de cocina propia dependiendo de una empresa. 


Entre los aspectos que se han de mejorar, se ha observado que se come demasiada pasta en relación al arroz; se suelen poner frituras en las guarniciones cuando deberían ser ensaladas; la carne se ofrece tres días a la semana y tendría que disminuir; el pescado se sirve una vez por semana y habría que llegar a seis comidas al mes; el huevo no llega a una unidad por semana que habría que tomar; se sirven pocas ensaladas; y los postres deberían ser yogures o queso.Recomendaciones 


Una de las primeras recomendaciones del informe es "reducir la desigualdad y la pobreza para aminorar el problema de la obesidad infantil", además tiene que haber una "apuesta clara" de las instituciones para aplicar medidas "que hagan frente a la potente industria alimentaria, que busca sus propios beneficios, para proteger la salud de los ciudadanos". 


El trabajo en el ámbito educativo es "fundamental", al igual que formar a profesionales en la alimentación sana y equilibrada y también "educar a las familias" en habilidades competencias y hábitos alimenticios saludables. 


Las recomendaciones también se extienden al ámbito de las políticas públicas, como facilitar el acceso a la verdura y fruta fresca con programas tipo "cesta de la compra de oferta"; la realización de mercados ecológicos con productos de la huerta cercana y "prohibir la publicidad engañosa en la televisión". 


Difundir campañas de sensibilización en los medios de comunicación y elaborar un documentos con propuestas de menús semanales baratos y sanos, incluyendo recetas de distintas minorías que viven en el barrio, son otras de las recomendaciones. 


Alquézar ha abogado finalmente por hacer una comisión de seguimiento de este estudio para observar la evolución de la aplicación de las propuestas.Público-privada 


El consejero municipal de Acción Social y Deportes del Ayuntamiento de Zaragoza, Roberto Fernández, ha ensalzado la colaboración público-privada como es la realización de este estudio porque "es buena y necesaria y es de reconocer que 'la Caixa' haga este esfuerzo". 


Roberto Fernández ha ofrecido el dato de que 200.000 personas han acudido a las ayudas de urgente necesidad, que "es un aumento del 68%" para avanzar que "quiero un millón más de los seis que hay para ayudas de urgente necesidad". Ese millón de euros, que surge de la aceptación de una enmienda del grupo municipal de CHA, se destinará también a becas de comedor. 


Esta "explosión de la demanda" de las ayudas de urgente necesidad se ha solicitado para "cuestiones alimenticias y también "empezamos a ver que hay pobreza energética", ha alertado.

500 millones de obra social

El director del área Social de la Obra Social 'la Caixa', Marc Simó, ha recordado que anualmente se destinan 500 millones de euros en toda España, de los que dos tercios son para proyectos de carácter social. 


Simó ha enfatizado que la colaboración con las instituciones más próximas a los ciudadanos, como son los ayuntamientos, y en concreto con el de Zaragoza "nos sentimos muy confortados y aprovechamos con más eficiencia los recursos".