Cambridge ficha a un científico de la UZ para estudiar la producción de proteínas

Jorge Júlvez estudiará la producción de proteínas beneficiosas para la salud. Estará allí dos años.

Jorge Júlvez, el científico de la UZ que irá a Cambridge
Cambridge ficha a un científico de la UZ para estudiar la producción de proteínas

Jorge Júlvez, un científico del Instituto de Investigación de Ingeniería de Aragón (I3A) de la Universidad de Zaragoza, se sumará al proyecto desarrollado por la Universidad de Cambridge para mejorar la producción de proteínas beneficiosas para la salud.


El investigador permanecerá allí dos años, gracias a la beca Marie Curie, donde formará parte de un equipo multidisciplinar compuesto por 97 profesionales como biólogos, físicos, matemáticos, químicos e ingenieros.


En el proyecto se prestará especial atención a la lisozima, una proteína con propiedades inmunes y antiinflamatorias pero ¿Cómo se puede producir una proteína con una secuencia de aminoácidos concreta, plegada adecuadamente y lista para ponerla a trabajar? Una de las formas más habituales es insertar en el ADN de un organismo el gen que codifica la proteína que se quiere producir. Cuando el organismo procese el gen introducido, producirá la proteína deseada: "Para producir proteínas podemos hacer uso de la precisa maquinaria existente en todas las células. De este modo, estos organismos modificados genéticamente, en la mayoría de los casos bacterias y hongos, son utilizados como fábricas de proteínas”, explica Jorge Júlvez. En el caso de la lisozima, un organismo apropiado para su producción es un hongo, la levadura de la cerveza.


La inserción de genes en el ADN de bacterias y hongos está siendo utilizada con éxito en la actualidad para producir varios tipos de proteínas: "La mayor parte de la insulina suministrada a pacientes con diabetes es producida por bacterias a las que se ha insertado el gen que codifica la insulina, la hormona del crecimiento puede producirse de forma similar", aclara Júlvez.


La relevancia de las proteínas en los procesos vitales implica que su carencia o exceso pueda conllevar desajustes importantes en la vida del organismo. Por ello, un conocimiento profundo de los procesos involucrados podría tener aplicaciones prácticas como la producción de proteínas humanas, el diseño de nuevos fármacos o la búsqueda de terapias genéticas en enfermedades como la fibrosis quística, el sida o el cáncer.Objetivos del proyecto


El principal objetivo de este proyecto es elaborar un mapa de todas las reacciones que permita predecir cómo va a ser la producción de proteínas ante diferentes situaciones.  En la levadura de la cerveza, alrededor de 2.000 proteínas intervienen en su producción, todas ellas deberán ser incluidas en el mapa. 


El segundo objetivo será analizar el mapa para averiguar los puntos críticos que limitan la producción de proteínas, cómo afectan los nutrientes a esta producción o cómo responde la célula a diferentes cambios genéticos. A partir de ahí, se trabajará para diseñar acciones de control sobre el proceso de producción de proteínas de la célula para sacarle el máximo provecho como fábrica de lisozima.