Denunciado un vecino de Ontinar por partir un palo en la nuca a una niña discapacitada

Los padres de una niña de 11 años, vecina de Ontinar del Salz y con una discapacidad psicomotora del 49%, han denunciado a un vecino de esta pedanía de Zuera por golpear en la nuca a la menor con el mango de una escoba y causarle una fisura de una vértebra y la luxación de otras dos. La víctima, que se llama Paloma A., ha permanecido ingresada en el Hospital Infantil los últimos días y precisa de momento de un collarín y reposo, a la espera de las pruebas médicas que se le están practicando para concretar el alcance sus lesiones. 

El suceso se produjo el pasado 30 de agosto, sobre las 22.15, en las terrazas de las piscinas municipales de Ontinar del Salz, según consta en la denuncia presentada ante la Guardia Civil de Zuera. La niña se encontraba jugando en el césped, cuando un vecino de esta pedanía de Zuera accedió a las instalaciones con una escoba y "sin mediar palabra" golpeó a la menor en la cabeza.

La violencia de la agresión fue tal que el palo llegó a partirse en la nuca de la niña. Cuando intentó golpearla de nuevo, según consta en la declaración de la madre recogida en la denuncia, las personas que estaban en la terraza se lo impidieron. Los padres,  así como numerosos vecinos, estaban presentes en el lugar de los hechos de la agresión. 

La niña fue trasladada al consultorio médico de Zuera, donde se le diagnosticaron lesiones leves y la enviaron a casa. Pero las molestias no remitieron y finalmente los padres llevaron a la menor a Urgencias del Hospital Infantil, donde la menor quedó ingresada el pasado día 5 de septiembre dado que las heridas eran de mayor relevancia.Investigación abierta

El centro hospitalario remitió, de oficio, lo ocurrido al juzgado. Se le prescribió el uso de un collarín rígido y reposo, a la espera de una resonancia magnética de la columna que se le practicará el próximo viernes. Fuentes de la Guardia Civil explicaron que tras la agresión se abrieron diligencias por una falta de lesiones. "Pero la investigación continúa abierta a la espera de la evolución de esas heridas", explicaron fuentes del Instituto Armado.

Este diario contactó con Cristina Espinosa, la madre de la menor, que explicó que no conoce al agresor y que se trata de una persona mayor, de unos 70 años. Dijo que la Policía identificó al vecino y, según sus palabras, este aludió a que los niños le habían estado molestando tocando el timbre, algo que estos niegan. En cualquier caso, su madre aclaró que la menor no se separó de sus padres en ningún momento."Mi marido estaba de espaldas y cuando se giró ya había pasado todo. Pero yo lo vi sin poder hacer nada", explicó afectada. La niña está a la espera de un análisis psiquiátrico, dado que tras la agresión "tiene miedo de salir a la calle", según explicó la madre, que agregó que solicitarán una orden de alejamiento. 

Los hechos ocurrieron solo cuatro días después del cumpleaños de la menor, que además ha sido una de las majas infantiles de las fiestas de Ontinar, designación que le hizo una gran ilusión y que no ha podido disfrutar por la agresión, como explicó su madre, que expresó su agradecimiento al Ayuntamiento, a la comisión de fiestas y a los vecinos por el apoyo prestado.