Los uncastilleros se reúnen alrededor de un rancho

El municipio de las cinco villas encara hoy su tercer día de celebración

Decenas de vecinos se acercaron hasta el pabellón para la comida popular.
Los uncastilleros se reúnen alrededor de un rancho
Noeli Barceló

Alrededor de 200 personas se dieron cita ayer a mediodía en la concentración de ranchos que se celebró en el polideportivo. "Sin concurso porque sólo se trata de compartir y pasar un buen rato, por eso hay menús alternativos como patatas a la riojana o fideuá" y no faltó quien disfrutó solo del aperitivo. Los integrantes de la comisión de Festejos se encargaron del reparto de la sangría. "Somos 16 y no paramos en todas las fiestas pero tenemos la ayuda de las peñas y estamos contentos. En Uncastillo tenemos fama de tener las fiestas más participativas de la zona. La gente joven, las peñas, los mayores. Todos se implican y así conseguimos tener un montón de actos desde la mañana hasta la madrugada", dijeron Diego y Pilar.


A los ingredientes festivos imprescindibles como las verbenas o las vaquillas en sus distintas modalidades, en Uncastillo se añaden otros actos originales, muy divertidos y además ‘low cost’. Este es el caso del campeonato nocturno de tirada de caja en la cuesta de San Juan que se celebrará el próximo lunes. "Sólo hace falta una caja de las de cerveza, casco guantes y rodilleras. Arriba se toma impulso con las manos y los pies y .... abajo. Al final hay una colchoneta y ya vamos por la cuarta edición este año", cuenta Chipi, histórico de Festejos. Y si las cajas tienen seguidores, no se queda atrás el "Esbalizadero nocturno". Sólo hacen falta unas lonas, agua, jabón y neumáticos y desde luego muchas ganas de pasarlo bien.


Las fiestas se abrían el jueves con el pregón de Alan y Lucy, una pareja de inglés y escocesa que durante su viaje de novios llegaron a Uncastillo por casualidad. Tuvieron la suerte de ir el día de la víspera cuando las peñas recorren las calles junto a la charanga. Se lo pasaron en grande, de eso hace ya siete años y no han faltado nunca, aunque ahora ya vienen con su hijo Rafael y como dijeron en el pregón, ahora ya no pueden ir a los pipetes. Es la mejor prueba del buen ambiente que se vive en Uncastillo, donde todo el mundo es bien acogido y disfruta de la fiesta. Lo hacen en estos días más de 3.000 uncastilleros que tienen la población a rebosar, además de los muchos visitantes que llegan también para compartir la fiesta con los vecinos.