La calle del Carmen vuelve a abrir al tráfico después de tres meses de obras

Después de tres meses de zanjas, vallas y tediosos desvíos de tráfico, la calle del Carmen volvió a abrir ayer a la circulación y permitió que los buses de las líneas 35 y 38 recuperaran su itinerarios originales. El Ayuntamiento informó ayer de que da por concluidas las obras entre la avenida de Goya y la calle de Princesa, donde se han venido renovando durante semanas –y no sin polémica– redes de agua y vertido, así como pavimentos, calzadas, aceras y otras infraestructuras.

Los trabajos, que han supuesto una inversión de 270.000 euros, se han quedado a las puertas de la avenida de Hernán Cortés, que los vecinos de la zona y la oposición municipal también considera que precisa de un importante lavado de cara. Además, los trabajos efectuados en el tramo específico de la calle del Carmen tampoco han sido un ‘coser y cantar’, dado que al comienzo únicamente estaba previsto actuar sobre las calzadas y aceras del lado de los impares, aunque finalmente el Consistorio tuvo que rectificar y trabajar también sobre las de los pares. 

Final y felizmente, la intervención ha permitido renovar unas redes de saneamiento, que estaban instaladas a una gran profundidad y que acostumbraban a romperse (dado su diámetro insuficiente) y a causar estragos en locales y garajes. Las nuevas conducciones son de PVC de 315 milímetros «y dotan de capacidad suficiente al sistema de la calle», según fuentes municipales. En paralelo, se ha renovado también la red de suministro de agua potable, que ha mantenido su diámetro de 150 milímetros, pero que ha renovado el material con conducciones de fundición dúctil.

Los trabajos han permitido también renovar los pavimentos y las aceras, que han cambiando las baldosas de cuatro pastillas por otras blancas y negras similares a las del entorno. Con esta actuación se ha procurado eliminar también los hundimientos y los problemas que se generaban tanto a los peatones como a las fachadas de los comercios los días de lluvia.

«Consideramos que estas mejoras van a suponer un beneficio claro para los vecinos de la zona y redundarán también en una mayor comodidad para los conductores y los peatones», apuntó ayer la concejal de Infraestructuras, Lola Campos, quien recordó que la intervención en esta calle se ha tenido que segmentar, dejando para más adelante el tramo hasta Hernán Cortés, porque no se pueden realizar nuevas inversiones en la ciudad hasta que el Gobierno central no permita la captación de deuda. «No obstante, con los únicos esfuerzos de un presupuesto ordinario muy recortado tratamos de atender las cuestiones más urgentes y de mantener la ciudad, avanzando aunque sea con las actuaciones organizadas en fases», afirma Campos.

Para la oposición municipal, el Consistorio no puede hacer grandes inversiones «por su mala situación económica y no por una normativa estatal», según recalcó el portavoz del PP, Eloy Suárez, en una reciente visita a las obras. Junto a los vecinos, Suárez recordó que existe un proyecto de 2005 para la renovación integral de la calle, mientras que el vicepresidente de la asociación Puerta del Carmen, Carlos Terrer, también reclamó que los trabajos se prolonguen hasta Hernán Cortés como llevan reclamando los residentes más de diez años.