Zaragoza atraviesa la década más calurosa en 120 años

Un estudio de la Universidad de Zaragoza demuestra que la temperatura media anual de Zaragoza ha aumentado 1,6 grados en 120 años.

Zaragoza está atravesando la década más calurosa de su historia desde 1892. Según un estudio de la Universidad de Zaragoza, la temperatura media ha aumentando en 1,6 grados en los últimos 120 años, y la tendencia podría mantenerse al alza en los próximos años.


Así lo ha confirmado este miércoles el catedrático de Geografía y Ordenación del Territorio de la Facultad de Filosofía y Letras, José María Cuadrat, quien ha dirigido la un estudio científico sobre el impacto del cambio climático en el mapa térmico zaragozano elaborado junto con la Agencia de Medio Ambiente y Sostenibilidad.


El informe ha sido realizado con la información térmica recogida por diez observatorios zaragozanos y revela el aumento de de las temperaturas máximas anuales en 0,44 grados, y el de las mínimas en 0,33.


Se muestra un panorama caracterizado por días y noches más cálidos y menos frecuencia de días fríos?. "Este estudio constituye una de las series más largas de toda España, en la que hemos apreciado un aumento generalizado de las temperaturas, que no ha dejado de crecer en los últimos 30 años y que ha afectado sobre todo a los extremos térmicos de manera espectacular", explica el catedrático.


Más noches tropicales

Los días de calor extremo se intensifican desde los años ochenta, con una mayor presencia de 'noches tropicales' (con mínimas por encima de los 20 grados): 386 en el periodo 1991-2010, frente a las 89 entre 1900 y 1930. 


Por otro lado, son cada vez más frecuentes los años en los que la temperatura máxima diaria de la capital aragonesa supera los 35 grados, frente al descenso del número de heladas: tan solo se han registrado 13 días con temperaturas máximas inferiores a los 0 grados en Zaragoza en los últimos 20 años. Sin embargo, como explica Cuadrat, este comportamiento se está dando de manera general en toda España, e, incluso, en el mundo.


Además, como explica el catedrático, son hechos palpables por los ciudadanos: "Cuando doy clase a los alumnos del Aula de la Experiencia me dicen que ya no hace el frío de antes, que ya no tienen que proteger las plantas por la noche para que no se hielen. Estos hechos comienzan a tener sus consecuencias sobre la ciudadanía". En esta misma línea, recuerda que, cada vez es mayor el número de noches muy cálidas que afectan al descanso de los zaragozanos.


La ciudad crea su propio clima

Además de los cambios generales, hay que atender a los que se refieren a la propia ciudad que crea su propio clima. "Es lo que denominamos efecto Isla de calor. El tráfico, los edificios, los aires acondicionados, etc, suponen un incremento de calor. Esto quiere decir que en los barrios céntricos las temperaturas pueden ser cuatro o cinco grados más altas que en el extraradio", afirma. 


La finalidad de este informe es ayudar a mejorar la planificación y gestión urbana, para una mejor adaptación de la ciudad al cambio climático. 


A pesar de los problemas del cambio climático que estamos atravesando, Cuadrat indica que este aumento de las temperaturas también tiene su lado positivo: "Menos gasto de calefacción o la reducción de las heladas, por ejemplo. Se trata de intentar reducir los aspectos negativos y maximizar los positivos a partir de los instrumentos que tenemos", concluye.

Cumpliendo objetivos sobre emisiones de CO2

El estudio, presentado este miércoles en el Ayuntamiento de Zaragoza, ha contado con la presencia del consejero de Medio Ambiente del Ayuntamiento, Jerónimo Blasco, quien ha señalado que el último indicador sobre emisiones de CO2 en la ciudad recoge un descenso del 19% entre los años 2005 y 2013.