Grandes actos para los pequeños quintanos

Santa Ana, del 24 al 29 de julio.

Los jóvenes de Quinto practicaron el tiro con carabina y pudieron demostrar sus habilidades sobre la bicicleta

El circuito de la yincana puso a prueba la destreza sobre las dos ruedas de los quintanos. asier alcorta La subcampeona de España en tiro de carabina les enseñó a los pequeños las nociones básicas.
Grandes actos para los pequeños quintanos
A. A.

Tal y como demuestran todas las fiestas patronales que recorren los numerosos municipios repartidos por la geografía aragonesa a lo largo de este verano, los niños son unos de los principales protagonistas a la hora de programar los actos. Del mismo modo, lo fueron también ayer los chicos de Quinto en su quinta jornada de festejos.


La localidad tenía preparado para los pequeños quintanos unas actividades que, en ocasiones, parecían que les venían algo grandes de tamaño. Primero, disparos con carabina en el club de tiro local, y después una yincana en bicicleta que puso a prueba la habilidad sobre las dos ruedas de los jóvenes ciclistas.


Los pequeños tuvieron ocasión de aprender a manejar las pesadas carabinas de mano de la subcampeona de España, Cristina Agustín. La quintana dio la clase magistral enfundada en su traje de competición, otra pesada pieza de la ingeniería deportiva que permite minimizar los movimientos involuntarios del tirador y lo mantiene más quieto y estable. Los padres no tenían nada de lo que preocuparse al estar sus hijos bajo la atenta mirada de la deportista de élite y su entrenador, Javier Morales.


No dejaba de resultar gracioso la visión de los niños intentando sostener las armas de competición. A aquellos ‘bracitos’ de entre ocho y diez años todavía les faltaba fuerza para sostener la carabina. Cristina empezó a los 15, y tres años después ya era bronce en la Copa del Rey.


Un hora más tarde y bajando la ladera desde el club de tiro, otro grupo de chavales empezaba la yincana en bicicleta organizada por la comisión de festejos. Se trataba de un circuito de habilidad que ponía a prueba las destrezas de los chicos sobre el caballo de dos ruedas y su puntería. Además de esquivar conos y hacer sinuosos zigzags, tenían que acertar con una pelota de tenis en tres aros y chutar una pelota gigante de fútbol para marcar gol. Y para añadirle más presión al asunto, todo ello, a contrarreloj.


A Quinto aún le quedan por celebrar dos días más de fiestas, dos días más para honrar a Santa Ana. Para hoy, además de las vaquillas de las 11.30 y 19.00, la localidad ha preparado un concurso de disfraces y dibujo para los pequeños en las piscinas. Al durar toda la tarde, los padres no se deben preocupar por la merienda, porque la organización se hace cargo de ello. A las 21.00 está prevista la cena-homenaje a la tercera edad en el salón social La Codera, amenizado por la charanga ‘La Sentada’.