El director técnico de las naves de Caladero dice que el desfase está justificado

Fernando Romeo ha señalado que el sobrecoste de 3,3 millones se debió a la adecuación de las naves.

Fernando Romeo, director facultativo del proyecto de las naves de Caladero en la Plataforma Logística de Zaragoza, considera que el sobrecoste de 3,3 millones en la construcción de estas naves está "debidamente justificado".


Durante su comparecencia en la comisión parlamentaria de investigación que analiza las responsabilidades políticas en el desarrollo de Plaza, Romero ha asegurado que el "desfase" de más de tres millones de euros en la construcción de las naves se debió a los cambios que hubo que hacer en ellas para adecuarlas a la normativa vigente y al proceso productivo de Caladero.


Romero, trabajador de Intecsa-Inarsa, a la que contrató la empresa Plaza Desarrollos Logísticos para realizar estas naves, ha insistido en que los modificados en el proyecto se realizaron para adaptar las naves a la ordenanza municipal de Zaragoza de protección de incendios y las medidas impuestas por la licencia de urbanismo. También a las necesidades que fue demostrando Caladero para su complejo proceso productivo.


Las modificaciones, ha explicado, eran propuestas a Intecsa-Inarsa por la contratista, Conavinsa, que se aprobaban después de una negociación entre ambas empresas, "que no tenía nada de particular".


Pero no se modificaba ningún extremo de la obra que no estuviera autorizado por Caladero, el usuario final de la planta que se dedica al procesado, manipulación y comercialización de pescado fresco y marisco en bandejas.


Las obras complementarias que se realizaron, ha insistido Romero, se corresponden económicamente con el coste de 3,3 millones adicional. Además, ha precisado que él no controlaba las facturas, pero ha dado "fe" de que todas las certificaciones se corresponden con lo ejecutado.