El gobierno municipal socialista recibió ayer un revés en el consejo de administración de la sociedad Ecociudad Zaragoza. El PSOE se quedó en minoría tras el desmarque de IU, que sumó sus votos al PP, y para no perder la votación se vio forzado a retirar del orden del día el concurso público con el que se pretendía seleccionar a una empresa que se encargara de la gestión de los impagos del recibo de saneamiento y depuración, dado que la sociedad no dispone de medios para hacer estas gestiones. Es la primera vez que los grupos de izquierdas no logran un acuerdo en un asunto vinculado a la gestión de la depuración.

En un clima de cierta tensión, en cuanto se constató que IU no iba a apoyar el expediente, el alcalde, Juan Alberto Belloch, decidió retirarlo a petición de CHA. La empresa, según los pliegos de condiciones, debía encargarse de todos los trámites de envíos de cartas, llamadas telefónicas, mensajes de móvil o correos electrónicos para lograr el recobro de los recibos impagados. Se llevaría una comisión de cada deuda cobrada, que oscilaría entre el 15% y el 35% en función de su cuantía, con un tope máximo de 187.500 euros.

Tras la reunión, el vicealcalde y portavoz del gobierno, Fernando Gimeno, trató de restar importancia a lo ocurrido y confió en llegar a un acuerdo con IU en el próximo consejo de administración. "Vamos a escuchar las iniciativas de los grupos y si se les ocurre un modelo mejor", afirmó. Para Gimeno solo hay dos opciones: o se recurre a una empresa especializada en la gestión de impagos o el trabajo lo desarrolla la propia sociedad, de forma directa, como defiende IU.

Pero defendió la opción elegida, la de la privatización. "Hay empresas que lo hacen muy bien y que tratan bien a los ciudadanos", dijo el vicealcalde, tratando de contrapesar las críticas de que el Ayuntamiento estaba buscando "al cobrador del frac". En cualquier caso, insistió en que "se va a intentar cobrar" y que "todo el mundo tiene que pagar", pese a que de momento no hay un sistema claro para luchar contra la morosidad.

Los populares fueron muy críticos. "El gobierno ha retirado el expediente del orden del día porque es incapaz de explicar que una empresa privada va a encargarse del recobro a las personas que no pueden pagar el recibo", afirmó el concejal del PP Jorge Azcón. El edil recordó que la gestión del recobro hasta ahora la hacían funcionarios, en el servicio de recaudación ejecutiva, pero que los cambios en la gestión de la depuración impulsados por PSOE,CHA e IU a través de Ecociudad obligan a recurrir a la vía civil y, en último término, a los tribunales. "Es la antología del disparate, la chapuza permanente", dijo Azcón, que insistió en pedir la disolución de Ecociudad Zaragoza. A su juicio, lo ocurrido en el consejo de administración de Ecociudad confirma que "el tripartito no funciona, ni tiene comunicación, ni tiene coherencia, ni cohesión".

Raúl Ariza, de IU, insistió en la necesidad de explorar fórmulas de gestión directa, a través de la propia sociedad. "Se debe valorar si la recaudación se puede hacer con medios propios. En lugar de darle el dinero a una empresa, que se contrate personal", dijo. Rechazó que un asunto "tan sensible" como el cobro del recibo del agua "se lleve con una empresa especialista en el cobro de morosos". Y exigió, ante todo, que se dé prioridad a las grandes deudas y que se "discrimine quien no paga porque no quiere del que no paga porque no puede".

Juan Martín, de CHA, era el único representante político en Ecociudad que apoyaba al gobierno municipal. Se preguntó por qué Ariza no defendió la gestión directa en otros dos contratos aprobados ayer, como el de la asesoría jurídica o el telemando. Mostró su disposición a llegar a acuerdos, pero se mostró molesto por la "demagogia" de PP e IU.