"El barrio del Temple es un monocultivo de bares de noche y queremos cambiarlo"

Contemple busca reconvertir una de las principales zonas de bares de Zaragoza en un barrio 'slow'.

Plaza de San Felipe
El barrio del Temple es un monocultivo de bares de noche

"El Temple es un monocultivo de bares de noche". Esta es la forma en la que Delia Maza, portavoz de la plataforma Contemple, define el barrio en el que vive. Pero va más allá: "Durante el día es un desierto y por la noche todo es ruido". Su visión coincide con la del grueso de los vecinos de la zona del Temple y con la de los escasos comerciantes asentados en uno de los principales puntos de ocio nocturno de Zaragoza.


Para darle la vuelta a esta situación, nació hace casi dos años la Plataforma por la Regeneración Integral del Barrio del Temple. Una asociación de vecinos, comerciantes y artistas que este año por fin ha visto como la administración municipal se comprometía con algunos de sus objetivos. El nuevo Plan Integral del Casco Histórico (PICH) ha incorporado por primera vez en sus presupuestos algunas partidas orientadas a regenerar el barrio del Temple, una de las principales peticiones de esta plataforma que pretende transformar su zona en un barrio 'slow'.

Reorientar la actividad económica

Y ¿qué implica 'slow' para los vecinos? Pues reconvertir los bares de noche en negocios de día "ecológicos, responsables con el medio ambiente y preocupados por las personas que integran el barrio". El objetivo es hacer del Temple un barrio "tranquilo", vinculado a la actividad económica del Mercado Central y al proyecto para impulsar la agricultura ecológica 'Huertas LIFE Km 0'.


Por eso, la plataforma Contemple intenta incentivar la compra de licencias de locales nocturnos, como ya se hizo en el número 23 de la calle Manifestación. En este punto, el antiguo bar de noche 'La taberna de los atunes' se transformó en un espacio de día donde el aceite de oliva es el protagonista.


La plataforma aspira a obtener el respaldo institucional del Ayuntamiento y del Gobierno de Aragón en ese proceso de transformación. Por eso, piden activar ayudas para la transformación de la actividad económica de ocio nocturno a actividad de día. "Los negocios no tienen por qué desligarse de la hostelería pero queremos variedad. Podrían ser bares de día vinculados a la filosofía 'slow food'", matiza la portavoz de Contemple.

Aportaciones del PICH

Los promotores del movimiento Temple Slow ven en algunos de los proyectos del nuevo PICH la oportunidad de impulsar esta regeneración del barrio, como por ejemplo en la utilización del solar del número cuatro de la calle de Contamina como un espacio para comercializar productos agroecológicos de productores aragoneses.


Otro de los proyectos en el que vecinos y comerciantes ponen sus esperanzas consiste en la activación de pop-up stores en el edificio de la calle del Olmo número 18. "Allí se ha propuesto hacer una intervención similar a la que se hizo en las Armas y en San Agustín pero con tiendas efímeras y mercados de artesanía o de agricultura temporales, a modo de feria urbana. De momento se está gestionando pero su inclusión en el PICH ya es un paso muy grande", explica Delia Maza a Heraldo.es.

Al margen durante años

La plataforma Contemple siempre ha criticado el presupuesto del Plan Integral del Casco Histórico se ha concentrado, hasta ahora, en las zonas de San Pablo, el Gancho y la Magdalena, dejando al Temple "un poco al margen". "Siempre se han mostrado comprensivos con nuestras quejas por el problema del ocio nocturno pero nunca antes se habían destinado partidas presupuestarias para cambiarlo", exponen desde la asociación de vecinos y comerciantes.


El barrio del Temple parte de la calle de Alfonso I y atraviesa la calle Contamina cruzando la calle del Temple para bajar por la calle del Olmo hasta la plaza del Mercado. En la otra dirección, conecta las plazas de San Felipe y del Justicia, dos puntos emblemáticos del barroco zaragozano.