Los dos acusados de apalear y robar a un pastor de Zuera se enfrentan a 27 años de cárcel

La víctima, de 70 años, pasó dos meses en la uci por las graves lesiones que sufrió. Los ladrones lograron un botín de 700 euros.

El vecino y pastor de Zuera Enrique V. R., de 70 años, estuvo a punto de perder la vida hace diez meses a manos de dos individuos que le agredieron brutalmente, le ataron de pies y manos y le abandonaron a su suerte encerrado en su propio coche. De no ser porque cuatro horas después pudo desatarse y logró pedir ayuda a un vecino, el septuagenario habría muerto. De hecho, pasó 21 días hospitalizado, buena parte de ellos en la unidad de cuidados intensivos, y tardó en recuperarse cinco meses. Como secuelas le han quedado un trastorno neurológico por estrés postraumático, una pérdida de sustancia ósea en la cabeza y una cicatriz en el área fronto parietal de siete centímetros y medio.


El móvil de la agresión fue el robo que, según la Fiscalía, fue planeado con antelación por uno de los acusados, el ciudadano polaco afincado en la localidad zufariense Michal P., apodado ‘Milkhouse’. Esta persona estuvo durante un tiempo haciendo averiguaciones sobre la vida, actividades, horarios y costumbres de Enrique V. R., tales como las fechas de las ventas de ganado. Una vez recabada toda la información, dio instrucciones al también acusado Israel G. G. y a otra persona que no ha podido ser identificada, al parecer conocida como Mathins, para que robaran al pastor.


El asalto se produjo el 15 de junio de 2013, sobre las 5.30, cuando el septuagenario llegaba en su vehículo y se disponía a sacar las ovejas de su paridera. Al salir del turismo, Israel G. G. y el tal Mathins se abalanzaron sobre él y empezaron a agredirle con una violencia inusitada. Al hombre le acompañaban dos perros de pastoreo que intentaron defenderle y que también acabaron malparados: a uno le partieron el cráneo y al otro lo dejaron tuerto a golpes.


Tras apalear al pastor, sus agresores le rociaron la cara con un spray, le ataron de pies y manos con cuerdas y cinta carrocera y lo introdujeron malherido e inconsciente en los asientos traseros de su vehículo. Antes de abandonarlo a su suerte, le quitaron todo lo que llevaba encima, incluidos un teléfono móvil Nokia, 300 euros en efectivo y las llaves del corral y de su casa en Zuera.

Asalto en su vivienda

Hasta las 9.15, aproximadamente, la víctima no consiguió desatarse y pese a su edad y a la gravedad de las lesiones, consiguió salir del coche y caminar los cincuenta metros que separan su paridera de la vivienda de un vecino, que le prestó auxilio.


Mientras tanto, los delincuentes fueron al domicilio de la víctima, al que accedieron con las llaves, y lo registraron de arriba abajo en busca de dinero y objetos de valor. De allí se llevaron 400 euros, unos zapatos nuevos, un teléfono móvil Alcatel sin estrenar valorado en 169 euros y una caja de caudales.


Después, según el escrito de calificación de la Fiscalía, Israel G. G. y Mathins se fueron a casa de Mercedes Elisa P. D. y Rafael Bernardo G. L., también vecinos de Zuera, a los que contaron lo que habían hecho y les pidieron que les ayudasen a abrir la caja fuerte. La pareja se prestó a colaborar con ellos pero, una vez abierta, descubrieron que dentro solo había documentos, los cuales quemaron para no dejar pistas. Después, Rafael Bernardo G. L. se deshizo de la caja tirándola por una tapia y a Mercedes Elisa P. D. le dieron el móvil Alcatel, que ella regalaría después a su hija y que la Guardia Civil recuperó.


Para la Fiscalía, estos hechos constituyen un delito de robo con violencia, otro de detención ilegal, otro de lesiones y otro de robo con fuerza en casa habitada del que son autores Israel G. G. en grado de autor material y Michal P. como inductor. Para el primero, defendido por la letrada Carmen Sánchez, pide 16 años de prisión –ya que es reincidente– y para el segundo, once años y medio. A Rafael Bernardo G. y Mercedes Elisa P. les solicita un año para cada uno por encubrimiento.