Los comerciantes de la avenida de Madrid recogen firmas contra el tranvía

Consideran que la segunda línea empeoraría el transporte público y provocaría cierre de establecimientos en Las Delicias.

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Los comerciantes de la avenida de Madrid han comenzado a recoger firmas para expresar su oposición a la hipotética segunda línea del tranvía al considerar que generaría más perjuicios que beneficios. Critican que el trazado proyectado supondría el desplazamiento del tráfico privado del eje central de Las Delicias, lo que provocaría «el colapso circulatorio en todo el barrio y tendría consecuencias negativas sobre el comercio y los vecinos». La Asociación de Empresarios del Sector Comercial Avenida de Madrid, junto a la asociación de vecinos Nuevo Futuro, la también entidad vecinal Nuevo Delicias y la asociación cultural Catalina de Aragón impulsan esta recogida de firmas que harán llegar al Ayuntamiento. Aseguran que «el comercio de proximidad necesita todas las ayudas institucionales posibles para salir de la crisis» y unas obras prolongadas supondrían «la puntilla para los establecimientos».


Con la campaña –muchos carteles cuelgan ya en los escaparates–, los comerciantes pretenden trasladar a los políticos que «la enorme inversión necesaria para la nueva línea tiene alternativas más rentables, social y económicamente». Apelan así a la responsabilidad de los gobernantes para que descarten inversiones «que nadie necesita y nadie reclama», y para que «prioricen las necesidades de los vecinos sobre las obras de lucimiento personal».


El Ayuntamiento quiere tener para este mismo año el proyecto de la línea este-oeste, para lo que ha reservado en el presupuesto una partida de 100.000 euros. Se pretende que se puedan encargar el estudio de viabilidad, el anteproyecto y el proyecto de la segunda línea tranviaria, a pesar a que de momento no hay una financiación posible y de que la ejecución quedaría en manos de la próxima corporación municipal. Según los estudios realizados por el Consistorio, la segunda línea tendría un coste de 180 millones, que se afrontaría con capital privado. Esos planes dibujan un trayecto desde San José hasta Las Fuentes, pasando por la avenida de Madrid, Conde Aranda, el Coso, plaza de San Miguel y Compromiso de Caspe hasta San Adrián de Sasabe. Después habría que elegir uno de tres ramales: por la avenida de San José, Cesáreo Alierta o Miguel Servet.