La concejal del Partido Popular en el Ayuntamiento de Zaragoza, Reyes Campillo, ha planteado este jueves la necesidad de que la ordenanza de las ayudas de urgente necesidad garantice una "respuesta ágil" y "criterios claros", adoptando las medidas que permitan llegar a "cuanta más personas, mejor".

Los populares reclamarán, en primer lugar, que los beneficiarios hayan estado empadronados en Zaragoza durante los últimos seis meses (salvo casos de extrema urgencia) y que las familias con niños discapacitados o personas dependientes tengan un tratamiento especial desde el punto de vista de la renta de la unidad familiar.

Por otro lado, Reyes Campillo propone que los beneficiarios de las ayudas urgentes tengan la obligación de estar inscritos en las oficinas de empleo o en cursos de formación y "no hayan rechazado ningún puesto de trabajo", ampliando al mismo tiempo los gastos susceptibles de financiación a los audífonos, material escolar, becas de comedor y alquileres por subarriendo de habitaciones. De igual modo, con el objetivo de facilitar el trabajo a los funcionarios, ha exigido que se clarifiquen las razones por las que no deben concederse las ayudas.

El Grupo Municipal Popular ha insistido también en la necesidad de reducir los plazos de concesión (actualmente en 40 días de media), estableciendo la obligación del Ayuntamiento de Zaragoza de resolver los informes de las solicitudes en 5 días, lo que supone reducir a la mitad el plazo establecido.

En este sentido, ha explicado que "las ayudas urgentes requieren de agilidad en su tramitación" y ha propuesto además que el equipo de gobierno preste más "atención presupuestaria" a las partidas previstas para las mismas, ya que "en un presupuesto de 667 millones de euros, solo el 1 % se destina a ayudas de urgencia, cuando se trata de una competencia propia del ayuntamiento".