El grupo de CHA en el Ayuntamiento de Zaragoza ha presentado 24 votos particulares para mejorar el borrador de Ordenanza de las Ayudas de Urgente Necesidad con el fin de que cubran las necesidades básicas y que lleguen al mayor número de personas posible.

Con estas propuestas, defendidas por el concejal de CHA Carmelo Asensio, también se busca mejorar los criterios de concesión y la finalidad de las ayudas y así como reducir el tiempo de espera de 39 días a 15 días, además de que lleguen al mayor número de personas en situación de riesgo de exclusión.

Según señala CHA en una nota de prensa, en Zaragoza más de 180.000 personas se encuentran en riesgo de pobreza o exclusión social, motivo por lo que la formación ha planteado durante este mandato incrementar las ayudas de urgente necesidad de 3,7 millones a seis millones.

CHA también defiende una nueva ordenanza que se actualice a los tiempos que corren y que permita garantizar las necesidades básicas de la población. De la nueva ordenanza, esta formación destaca la ampliación del concepto de vivienda para incorporar otro tipo de alojamientos, como habitaciones o cámping, alojamientos turísticos o temporales y la sustitución de la denominación de la unidad familiar por unidad económica de convivencia que recoge todo lo que está pasando, como el agrupamiento de diferentes personas en una misma vivienda para poder pagar el alquiler.

No obstante, CHA cree que hay otros aspectos que lo empeoran, como que se bajen los ingresos máximos para poder acceder a una ayuda y que va a dejar "fuera de las ayudas de urgencia miles de personas", motivo por el que uno de los votos particulares es que el indicador de referencia de la renta sea de nuevo el Salario Mínimo Interprofesional o, en su defecto, el 1,25 del IPREM.

CHA también plantea que se puedan complementar las ayudas percibidas de diferentes administraciones o que la ausencia de dinero no implique la denegación de las ayudas, ya que sería totalmente injusto denegar las ayudas por este motivo, para lo que solicita que se busque la financiación con modificaciones de crédito.

Asimismo, propone que en el alquiler de vivienda se contemple la posibilidad del subarriendo o ampliar los conceptos que se pueden incluir en la atención a las necesidades de los menores de edad que viven en familias en situación de necesidad como material escolar, comedores infantiles y participación en actividades sociales.