Año de inversiones en los templos bilbilitanos

El Ayuntamiento de Calatayud tiene previsto invertir más de 300.000 euros para restaurar su patrimonio eclesiástico. A ellos se sumará una partida para iniciar una nueva fase de la Colegiata de Santa María.

La Colegiata de Santa María, uno de los templos religiosos más emblemáticos de Calatayud, sigue en proceso de restauración a pesar de las numerosas intervenciones que ya se han realizado en sus cimentaciones, retablos o en la portada. Su avanzado estado de deterioro estructural la tiene cerrada al culto desde el 2010, y los trabajos continúan a paso lento pero firme.


Para continuar con su rehabilitación hasta devolverle su esplendor, en la lista de inversiones previstas por la Dirección General de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón, yace una partida de 205.000 euros que alimentaría la continuidad de una nueva fase. “El deseo del alcalde es el de abrir sus puertas antes de que acabe el año, pero todavía no podemos asegurar nada porque dependemos del ritmo de los trabajos y de los tiempos en los que nos lleguen las ayudas”, explica la concejal de urbanismo del Ayuntamiento de Calatayud, Mercedes Serrate.


Por su parte, el Ayuntamiento de Calatayud también contempla en sus presupuestos municipales para este año la inversión de más de 300.000 euros para invertir en la restauración de otros bienes eclesiásticos. La iglesia de San Pedro de los Francos, reabierta al público en el 2004 tras un cuarto de siglo en estado ruinoso, será una de las que mayor inversión reciba con un total de 165.000 euros que servirán para realizar dos intervenciones en el interior del centro gótico-mudéjar.


Con 70.000 euros está previsto instalar un nuevo sistema de climatización y con los 95.000 restantes, la intención es la de restaurar el retablo del altar mayor dedicado al santo que da nombre al templo.


A finales de año, en este misma iglesia concluían unos trabajos de restauración de la fachada exterior. Las obras estuvieron centradas en la eliminación de las humedades y la consolidación de la estructura del lado izquierdo del edificio.


“Todos los templos tienen una gran antigüedad y cuando se acaba un trabajo de restauración es necesario empezar con otro. Por eso, nuestra voluntad es la de trabajar en el cuidado de los mismos y seguir invirtiendo en el extenso patrimonio eclesiástico de Calatayud, pero necesitamos la ayuda de las instituciones”, apunta Serrate.

Los trabajos también continuarán en la iglesia de San Andrés

En San Andrés, sus puertas se abrían en noviembre tras un año cerradas a causa de unas obras de rehabilitación que cesaron con la intención de retomarse en el 2014. En ellas se invirtieron 600.000 euros para consolidar la estructura del templo y se restauró la capilla de la Vera Cruz, la sacristía, la cúpula exterior y la fachada.


El consistorio se comprometió a seguir con las mejoras a través de la restauración de la capilla bautismal, localizada a los pies de la torre y prevé invertir 30.000 euros. Estos trabajos que cuentan con la participación de la Escuela Taller de Cerámica de Muel, encargada de realizar la réplica de unos mosaicos que faltan en la pila bautismal. Además, el consistorio ha solicitado una ayuda para sellas el cierre de la estructura y realizar unos arreglos en el ábside.

Actuaciones en la capilla de la colegiata del Santo Sepulcro

El Ayuntamiento bilbilitano también tiene previstos algunos trabajos en las dañadas torres de la colegiata, donde se encuentra un pináculo por que se filtran las precipitaciones. Para ello se ha solicitado una ayuda de 70.000 euros. Asimismo, también se prevé una actuación en la capilla del Carmen.