El baúl de los recuerdos se abre en la Multiusos

Este fin de semana tiene lugar el IV gran desembalaje de antigüedades en la Sala Multiusos de Zaragoza.

Anticuarios, coleccionistas, melómanos, numismáticos y filatélicos tienen una cita ineludible en la capital aragonesa durante todo el fin de semana. La Sala Multiusos acoge la cuarta edición del gran desembalaje de antigüedades, un despliegue de objetos de diferentes décadas que llevan a sus compradores a otras épocas y lugares.


Los hay para todos los gustos: desde pequeñas navajas suizas hasta abrigos 'double face', pasando por vinilos, figuras decorativas, teléfonos de ruleta, cámaras de fotos de muelle... También se encuentran objetos de mayor volumen, como gramolas, cunas vintage, muebles de todo tipo e incluso un dispensador de gasolina francés de finales de los setenta.


El evento no es un atractivo que se quede en el público local, sino trae a la ciudad amantes de lo antiguo de otras provincias cercanas. "Nos gusta decorar la casa con objetos diferentes, que llamen la atención y que sean divertidos", explicaba Elena Navarro, una castellonense que se ha desplazado a Zaragoza junto a su marido para trastear por los diferentes puestos.


Uno de los puntos fuertes de la feria es la competitividad de los precios respecto a otras de su entorno. "Estuvimos hace poco en la de Burgos y las cosas valían el doble o el triple", señalaba María, una visitante soriana, mientras ojeaba juguetes movidos por automatismos. "Mi padre los colecciona", apuntaba.


Por su parte, los responsables de Curiosity Antic, la empresa organizadora, se muestran optimistas con esta edición y con el buen cartel que el evento está alcanzando en el mundillo. Este año se han quedado fuera dos decenas de vendedores y la afluencia de público está siendo más alta que nunca.