Emprendedores

"Queremos hacer lápidas distintas, que emocionen"

Dos jóvenes arquitectos zaragozanos ponen en marcha una empresa de diseño de lápidas personalizadas: Caelum. "Está habiendo un cambio cultural en cómo se trata la muerte", afirman.

Algunos de los modelos de lápidas de Caelum
"Queremos hacer lápidas distintas que emocionen"

Hace unos años, Raúl Martínez y Sandra Bielsa, jóvenes arquitectos zaragozanos, no podían imaginarse que se ganarían la vida diseñando lápidas. Acaban de montar su propia empresa de lápidas personalizadas, Caelum Lápidas, y están muy ilusionados con las posibilidades de innovar en el arte funerario.


El germen de la empresa surgió por una experiencia personal. "Estaba trabajando como jefa de obra y falleció mi abuelo, en 2009. Mi familia me encargó que fuera a elegir la lápida. No encontraba nada que me encajara y decidí hacer yo misma el diseño. Contacté con los gremios que conocía por mi trabajo para que me hicieran la lápida. A mucha gente le gustó y pensé que tal vez en el futuro podría dedicarme a esto", cuenta Sandra, de 31 años, arquitecta técnica y joyera.


Sandra siguió diseñando lápidas y dándole forma a su idea, después se asoció con Raúl y ahora acaban de poner en marcha la empresa. Ya tienen varios encargos y hace unos días estuvieron colocando una lápida en Vinaceite, de donde procede la familia de Sandra.


En su web han colgado un catálogo de lápidas y también ofrecen diseños personalizados según las peticiones de las familias. "Trabajamos con materiales y texturas, y buscamos una estética distinta, con figura abstractas. Queremos hacer lápidas que emocionen", resume Raúl. Él estudió Arquitectura en Barcelona y tras acabar la carrera se marchó a Holanda a buscar trabajo. Unos meses después decidió volver a Zaragoza y apostar por este proyecto.


"Está habiendo un cambio cultural en cómo se trata la muerte. Las tradiciones están cambiando, hay más incineraciones, las familias apuestan por ceremonias más íntimas y personalizadas. Nosotros aportamos un cambio en la parte estética", afirma este arquitecto y diseñador.


Sus lápidas combinan la piedra (normalmente usan mármol de Calatorao) y el metal, que trabajan para darle forma. Ellos diseñan los modelos y encargan su fabricación a distintos gremios. En un plazo de 2 a 4 semanas suelen estar terminados, dependiendo de la lápida escogida. Ofrecen sus servicios a particulares y a empresas funerarias.


En el futuro, les gustaría seguir innovando en el diseño de productos funerarios (urnas, columbarios, panteones) e incluso de cementerios. "En otros países los cementerios son lugares de paseo, más acogedores y menos fríos que aquí. Se puede innovar mucho en este terreno", afirman.