Industria

Calatayud ofrece suelo industrial a coste cero para reactivar el sector

El cerrojazo de la planta de Kimberly Clark dejó tocado el mercado laboral de la comarca bilbilitana. Ahora, el Ayuntamiento ofrece bonificaciones para aquellas empresas dispuestas a generar empleo.

Empresa Kimberly-Clark en Calatayud
Calatayud ofrece suelo industrial a coste cero para reactivar el sector
HA

“Bajar drásticamente el precio del suelo industrial” es una de las medidas que los expertos económicos señalan como “imprescindibles” para contribuir a levantar el desplome general de la industria en España. Y Calatayud, una de las localidades aragonesas más afectadas por el derrumbe del sector, parece haberse tomado la recomendación en serio.


El corazón industrial de la ciudad bilbilitana quedó tocado tras el reciente portazo de la multinacional estadounidense de celulosa Kimberly Clark, a mediados del pasado mes de mayo. Tras no cerrar ninguna de las negociaciones iniciadas para vender la planta, la factoría de pañales tomó la decisión más drástica. Salió de la localidad cediendo las llaves de las instalaciones al Ayuntamiento de Calatayud y dejando en las filas del paro a más de 200 trabajadores.


Ahora, el Consistorio ha decido sacar al mercado naves empresariales a precios reducidos, incluso a coste cero, para captar nuevos inversores dispuestos a crear puestos de trabajo. “Son tiempos duros, pero nuestro objetivo es poner en valor el patrimonio industrial, llenando las infraestructuras existentes y creando trabajo”, apunta el alcalde bilbilitano, José Manuel Aranda. “Calatayud cuenta con una situación estratégica, con una estación de AVE, a pie de la A-2 y a medio camino entre Zaragoza y Madrid. Esto es algo que todo empresario debería valorar”, añade Aranda.

Se buscan candidatos dispuestos a crear empleo

Una de las factorías que ofrecen, es la de Kimberly-Clark. “En función de lo que establece la normativa vigente, su arrendamiento se podrá bonificar hasta el 100%, valorando el plan de negocio y de la creación de empleo. Pero esto será una negociación que se tendrá que llevar a cabo cuando tengamos propuestas en firme sobre la mesa”, explican desde el departamento de Industria del Ayuntamiento de Calatayud. Da igual el lugar de procedencia de los inversores, “el único requisito que pedimos es que generen empleo y su número será el que primará sobre los demás”, añaden.


La multinacional de pañales dejó una superficie edificada de 16.000 metros cuadrados, con dos fincas industriales de 90.000 metros cuadrados. Sin embargo, el Ayuntamiento también pone a la disposición de nuevos emprendedores o inversores otras superficies de menor tamaño. Es el caso de dos naves diáfanas de 150 metros cuadrados, en el Polígono de La Charluca, disponibles para alquilar por 300 euros (equivalentes al 6% de su valor). Pero su precio podría ser íntegramente bonificado durante los dos primeros años, en función del número de empleos que creen y de las reformas de adecuación que se acometan.


“Lo que queremos dejar claro es que buscamos empresas que generen empleo, no que utilicen los espacios como almacén. En todos los proyectos se valorarán las opciones de negocio, el número de puestos de trabajo que generará y en función de esos factores se adjudicarán las bonificaciones”, explican desde el departamento de Industria del Ayuntamiento de Calatayud.

Un vivero para los emprendedores

La Nave II, Local 1 de la parcela G-7 es otro de los espacios ofertados. En este caso, el objetivo es convertir el local en un vivero de empresas donde afloren nuevos proyectos emprendedores. Empresas procedentes del sector servicios o las nuevas tecnologías serían las más adecuadas para instalarse aquí debido a que este espacio disfruta de suelo técnico. Sus condiciones se resumirían en un año de alquiler de solo el 10%, con prórroga de seis meses en el caso de ser un proyecto emprendedor.


Como estos, otro paquete naves están a disposición de todos aquellos empresarios que se animen a crear empleo en Calatayud.

Un problema de tiempo atrás

La ciudad bilbilitana, cercana a los 23.000 habitantes hoy está azotada por una tasa de paro que roza el 30%. Actualmente cuenta con tres grandes polígonos industriales (Mediavega y La Charluca de titularidad pública y Alto de Paracuellos de iniciativa privada), la falta de tejido industrial siempre ha sido uno de sus principales preocupaciones.


A mitad de los 90, se dibujó ante ellos una línea de futuro más esperanzadora con la llegada de Dana Automoción, Cóndor CD y Kimberly Clark. Sin embargo, en los últimos años ha quedado desdibujada. Cóndor CD atraviesa dificultades económicas desde hace tiempo y ha reducido su plantilla a la mitad en los últimos años. Dana salió de la localidad en 2009 dejando a un centenar de trabajadores en la calle. Y el cerrojazo de Kimberly-Clark cayó como un jarro de agua fría para los más de 200 empleados que trabajan allí. Y por si fuera poco, entre otras grandes empresas, la factoría de cerraduras CISA también echó el candado en 2010 despidiendo a más de 130 trabajadores.