Animales

Un perro con certificado de ciudadano ejemplar

El nuevo centro Sedecan de Zaragoza será el primero en España en realizar el examen de la Asociación Nacional de Adiestradores Caninos que certifica que un can es apto para la convivencia cívica.

El centro canino Sedecan en Zaragoza
El centro canino Sedecan en Zaragoza

Perros educados y aptos para la convivencia cívica. Ese es el objetivo del programa diseñado por la Asociación Nacional de Adiestradores Caninos (ANACP) que, a través de un examen compuesto de diez pruebas, otorga el certificado de ciudadano ejemplar a los más peludos amigos del hombre.


El proyecto se basa en el prestigioso programa 'Good Citizen Canine' del 'American Kennel Club' y el examen, realizado ante un juez, evalúa tanto al guía propietario como al perro, para demostrar que tiene unas bases mínimas de obediencia básica que garantice la seguridad de los demás, la del dueño y la del propio animal.


En Zaragoza, el centro canino Sedecan, recién inaugurado, será el primero en toda España en realizar este examen, el día 7 de septiembre con un juez acreditado por ANACP.


Jesús Lasheras, propietario del centro homologado explica que "se trata de la concienciación de las personas en el manejo de los perros, no de una competición deportiva, se busca cambiar la mentalidad respecto a la educación y el control".


Para este adiestrador zaragozano, con este certificado se fomenta el respeto a los demás y ese cambio de mentalidad para que mucha gente deje de tachar a los propietarios de animales de "delincuentes y guarros" por culpa de unos pocos, ya que "a veces hay esa visión", cree Jesús, "trabajamos para cambiarlo".


Las pruebas, que no tienen que ver con el adiestramiento deportivo o profesional, inciden en el manejo del animal y la educación. "No hay que estar recompensando con comida tiene que haber control - afirma Lasheras-, no se permite coacción al animal, no hay exigencias, hay que conseguir que sean un equipo, uno ordena y otro obedece porque quiere hacerlo".



Diez pruebas para cuatro patas

El examen que acredita la educación cívica del perro consta de diez pruebas que el propietario puede preparar por su cuenta o acudir a un centro de adiestramiento para aprender.


Los diez ejercicios tienen distintos objetivos. Los primeros conseguir que el perro acepte de forma amistosa y calmada a un desconocido, sin mostrar signos de nerviosismo ni lanzarse elevando las patas para saludar. Además, para ocasiones como la visita al veterinario se utiliza la tercera prueba que consiste en una sesión de chequeo y acicalado por un desconocido.


Dueño y animal deben demostrar que pueden pasear tranquilamente solos o con otras personas y que el can responde a la llamada de vuelta y a las órdenes básicas: sentarse, echarse y permanecer quieto. También debe mostrarse tranquilo ante la presencia de otros perros y reaccionar correctamente a las distracciones. Por último, el perro debe estar preparado para la separación supervisada.


Un examen también para el dueño

Desde el centro Sedecan reconocen que a veces es difícil llegar a la gente con mascotas porque todo el mundo piensa que "su perro es muy bueno y el resto no". Por ello, a través de cursos teórico-prácticos, tratan de mostrar el por qué de unos comportamientos u otros porque el dueño "debe tener un conocimiento básico de la especie para poder manejarla".


Al igual que para conducir un coche se necesita un examen, ejemplifica Lasheras, para convivir con un perro hay que tener un conocimiento previo, "los perros obedecen porque quieren estar con su dueño, si no lo hacen es porque este no les ofrece nada", añade.


Un nuevo espacio perruno en Zaragoza

Sedecan, abierto hace mes y medio, será el primer centro homologado en España en realizar esta prueba de certificación, pero este espacio va más allá del adiestramiento.


El centro, situado entre Villamayor de Gállego y Montañana, con entrada por el segundo, cuenta con un "parque de atracciones" para los mejores amigos del hombre, con gymkanas, saltos, e incluso piscina, además de un espacio para realizar barbacoas.


Como explica su creador "por ahora se trata de montar un grupo de apasionados del mundo del perro, ayudarnos y favorecer la obediencia a través del juego". "Más adelante se podrá crear un grupo más especializado en la parte competitiva, pero solo una parte, lo demás está dirigido a gente de la calle para que aprendan el manejo básico", concluye.