Sentencia de la Audiencia Provincial de Zaragoza

Seis años de cárcel por simular ser el padre de inmigrantes para que entrasen en España

Se hacía pasar por padre de determinados compatriotas suyos para introducirlos en España pidiendo su reagrupamiento.

La Audiencia Provincial de Zaragoza ha condenado a Mahammadou H. D., de 63 años, natural de Gambia pero nacionalizado español desde hace mas de dos años, a seis años de cárcel por inmigración ilegal y falsificación, ya que se hacía pasar por padre de determinados compatriotas suyos para introducirlos en España pidiendo su reagrupamiento.


En la sentencia, emitida el pasado día 30 por la sección sexta de la Audiencia de Zaragoza, se condena a Mahammadou H. D. como autor responsable de un delito continuado de falsificación de documentos oficiales, cometido por particulares, y de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.


Según el relato de la sentencia, el condenado se aprovechaba de la circunstancia de estar nacionalizado español y se valía de documentos auténticos pero falsos en su contenido, obtenidos por diversos súbditos de Gambia (pasaportes y certificados de nacimiento falsos) para solicitar su reagrupación haciéndose pasar por su padre en los impresos de solicitud.


De esta manera, se agrega, "los gambianos" reagrupados o "a reagrupar" entraban al territorio español con la confianza de obtener la tarjeta de residencia a través del mecanismo de la reagrupación, gracias a la labor de Mahammadou H. D.


La sentencia considera probado que el acusado, junto a cada solicitud de reagrupamiento, presentaba un pasaporte auténtico confeccionado en Gambia en el que figuraba el sujeto a reagrupar pero como hijo del condenado.


Al parecer, estos pasaportes se adquirían a redes corruptas que falsean los datos de filiación a gusto del cliente pagador que pretenda reagruparse en Zaragoza, u en otra ciudad.


De este modo, el acusado, consiguió obtener permisos de residencia de familiar de residente comunitario que no correspondían a la realidad para seis personas en total.


La sentencia precisa que, "lógicamente", los funcionarios de la Brigada de Extranjería y de la Delegación del Gobierno en Aragón, actuaron "con total buena fe" basándose en la documentación aportada de Gambia, que "no contenía indicio alguno de raspado, lavado, ni reescritura".