Información social

"Necesitamos gente con experiencia que nos oriente para salir adelante"

Con el apoyo de Marea Naranja y particulares nació hace apenas un mes y medio en el barrio de Torrero una oficina de información y defensa de los servicios sociales que atiende al ciudadano.

Reclamo de la alternativa del IAI
"Necesitamos gente con experiencia que nos oriente para salir adelante"
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Adriana Beccera, de 45 años, dejó su Colombia natal hace dos años para venir a España en busca de oportunidades. Aprovechando sus estudios de gerontología, una vez aquí empezó a cuidar ancianos. Luego formó parte del PICH, trabajó en un AKI y volvió a limpiar hasta que escaseó el trabajo. Tras cinco meses de espera, hoy es una de las beneficiadas del IAI gracias a la ayuda prestada por una asistenta social del barrio. “Por medio de esta ayuda tengo un poco cubierta mi situación, pero hay casos que son verdaderamente preocupantes”, confiesa ella agradecida.


Junto a otras 30 personas, forma parte de una nueva iniciativa ciudadana, respaldada por Marea Naranja, que nació hace apenas mes y medio en el barrio zaragozano de Torrero para orientar a quienes se ven afectados por los recortes en materia de servicios sociales. “Ahora lo que hago es brindar ayuda al grupo con toda la experiencia que ya tengo y darle un poco de consuelo a la gente que está esperando una ayuda todavía”, explica.


La parroquia El Buen Pastor de Torrero les cede el espacio donde se reúnen cada miércoles de 18.00 a 20.00. Cuentan que el párroco del barrio disponía de una oficina pequeña donde atendía a los afectados por el retraso en la tramitación de esta ayuda. El servicio se prestaba los miércoles y con la colaboración de particulares se decidió retomarlo. “Una de las personas que está con nosotros lo conocía y mientras buscamos un local, se ofreció a hablar con la parroquia para que nos dejaran estar aquí hasta que se resuelvan las cosas”, señala Rosa Sánchez, trabajadora social de profesión y colaboradora desde hace un mes y medio en esta oficina improvisada de atención al ciudadano.

Atención directa

“Aquí –precisa- hacemos atención directa, asesoramos a personas que no saben cómo recurrir tras serles denegada una ayuda, a quienes han perdido la prestación por desempleo o se ven afectados por los recortes en la nueva Ley de Dependencia o en la partida de becas”. En función de las necesidades de cada uno, se han formado tres “vías” o grupos de actuación.


El problema más común –concreta Rosa- es el del IAI. La demora en las tramitaciones y el número de expedientes sin resolver están generando “cada vez más dificultades en las familias” que se encuentran en situación de “desamparo”. “El cómo salir y el cómo hacer para tirar para adelante es el problema más acuciante en estos momentos porque hay muchas personas que se han quedado sin nada”, denuncia Rosa.


En este espacio de “promoción y defensa de los servicios sociales” los afectados encuentran el respaldo de profesionales y ciudadanos anónimos dispuestos a echar una mano. “Ponemos nuestros conocimientos a disposición del que pueda venir e intentamos que los afectados por los recortes tengan una posibilidad en este espacio para que de forma conjunta podamos cambiar las cosas”, añade, optimista, Rosa.

Asesoría en temas sociales

De esta forma, empieza a sumarse poco a poco gente de otras disciplinas que quiere contribuir con la causa de estas 30 personas. La sensación general –indican – es de “indefensión ante el Gobierno”. “A veces se sienten como si fueran parásitos de la sociedad por toda la insistencia institucional en que haya control, control y más control”, asegura Rosa.

Ella es trabajadora social de profesión, pero insiste en que su participación en estos grupos de apoyo no tiene nada que ver con su labor. “Aquí me siento ciudadana y queremos que el que venga se sienta igual. El objetivo final es que los propios afectados sean quienes dirijan las asambleas”, destaca.


Adriana, por su parte, reconoce que sin la ayuda de estas personas anónimas que les están echando una mano, “no tendríamos ni idea de cómo arrancar”.

Asamblea en Casa Amparo

“Necesitamos gente con experiencia que nos oriente porque hay personas que no tenemos ese colchón familiar detrás”. Con gesto triste, recuerda el caso de conocidos que han tenido que mandar a sus hijos de vuelta a sus países de origen y están aquí “a medio vivir”.


“Yo estoy sola y lo paso mal, pero lo más triste es que está habiendo mucha desintegración familiar. En el caso de los inmigrantes es todavía peor porque al venirnos de allá se ha roto ya una familia, se ha logrado integrar de nuevo aquí y ahora se ha vuelto a romper por la situación económica”, lamenta esta colombiana, que teme regresar a su país “sin un duro y sin arraigo otra vez”. De momento, intenta tirar para adelante y “resurgir” por sus propios medios. Este martes, será ella quien lidere la asamblea informativa que tendrá lugar a las 18.00 en Casa Amparo. “La idea es hacerlo público y que con ayuda de todos, esto crezca. De momento, los que estamos somos realmente una piña y queremos que siga cogiendo fuerza”, concluye ilusionada.