El aeropuerto de Zaragoza se quedará sin otro vuelo más a partir de finales de marzo. A la suspensión de las dos conexiones semanales con Lanzarote y Tenerife por la quiebra de Orbest, anunciada el miércoles por la compañía, se sumará ahora la del enlace de Sevilla, decidida ayer por la aerolínea Ryanair dentro de sus planes de recorte de operaciones en España. La compra de billetes se podía hacer hasta el miércoles, pero ayer se bloqueó la venta, informa Fernando Orte.

La decisión de la compañía supone todo un varapalo, ya que la conexión andaluza supuso el año pasado el movimiento de 56.000 viajeros. Y lo peor es que se sumará a la caída del tráfico ya registrada en 2012 como consecuencia del severo recorte de vuelos de Ryanair por la reducción de las subvenciones: a lo largo del año se perdieron las conexiones de Roma, Bolonia, Tenerife, Las Palmas y Lanzarote. Su decisión supuso perder casi 200.000 viajeros, por lo que la cancelación de los vuelos de Sevilla, Tenerife y Lanzarote podría suponer cerrar el año por debajo del medio millón de viajeros y retroceder así a cifras de 2006.

La anulación de las dos rutas canarias no se podrá compensar con la que acaba de anunciar la empresa castellanoleonesa Goodfly, que tras meses de planificar su desembarco en la capital ha colgado en su web una oferta de plazas a 99 euros para volar de Zaragoza a Tenerife a partir del mes de junio. Su intención es que el enlace sea regular y tenga una periodicidad semanal (los sábados), aunque aún no sabe con qué modelo de avión iba a operar (lo condiciona a la marcha de la comercialización). Ryanair también volverá a volar a Lanzarote este primavera.

La nueva oferta se completará con el regreso ya anunciado de Volotea, que retomará sus vuelos con Ibiza y Palma de Mallorca para aprovechar la demanda vacacional. Lo que ha renunciado es a explotar la tercera ruta que ofertó el año pasado, la de Málaga, y que tuvo menos demanda que las isleñas.