Crecida extraordinaria del Ebro

Los vecinos desalojados de Peñaflor y Movera todavía no pueden volver a sus viviendas

A la espera de que la crecida del Ebro alcance su punto máximo este martes, las viviendas ubicadas en zonas de riesgo de inundación de Peñaflor y Movera se mantendrán deshabitadas.

Familia desalojada en Peñaflor
Familia desalojada_2
P. BERNE

Los vecinos desalojados de sus viviendas en los barrios de Peñaflor y Movera aún no pueden acceder a sus viviendas por el riesgo de inundación y porque los accesos a muchas de ellas están impracticables y se podrían quedar aislados.


Fuentes del Ayuntamiento de Zaragoza han informado de que en total han sido desalojados unos 80 vecinos de 50 viviendas, todas ilegales, en el barrio de Peñaflor, y otros 73 vecinos de 23 viviendas, también ilegales, en el barrio de Movera.


Ninguno de esas personas ha precisado de los servicios municipales y todos se encuentran en casas de familiares, mientras que una familia ha pasado la noche en el albergue de Movera y otra pareja se ha instalado en una caravana.


El nivel del río Gállego, a su paso por el barrio de Peñaflor, ha descendido pero se mantiene la orden de desalojo de todas estas viviendas al estar en una zona de riesgo de inundación y ante la expectativa de que la punta de la crecida del Ebro llegue sobre las 8.00 de este martes.


En el término municipal de Movera, que es donde se produce la desembocadura del Gállego en el Ebro, "se podría presentar la mayor dificultad porque el cauce del Ebro baja tan alto que no deja verter el agua del Gállego y podría hacer de represa", han detallado las mismas fuentes.