Riada

El deshielo y las lluvias podrían dar paso a una crecida extraordinaria

La CHE insiste en que "no debe causar daños ni inundaciones, salvo algún campo que se pueda anegar sin daños relevantes".

El Ebro a su paso por Gallur
Crecida en el río Ebro_2
@VIRGYSP

La crecida ordinaria del Ebro, que ya ha entrado en la provincia de Zaragoza, podría dar paso a una extraordinaria el próximo lunes, aunque no se prevé de gran magnitud, debido al deshielo y a las nuevas lluvias que se esperan para este fin de semana.


Así lo ha señalado este jueves el presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), Xavier de Pedro, en unas declaraciones facilitadas por el Organismo de cuenca.


En este momento, ha agregado De Pedro, existe un periodo de avenidas que se ha estado gestando a lo largo de la semana, como consecuencia de las intensas lluvias caídas y sobre todo a las precipitaciones de nieve.


Asimismo, se está produciendo un proceso de deshielo que, sumado a las lluvias que se esperan para este fin de semana, pueden cambiar la situación de avenida ordinaria a otra de carácter extraordinario.


Ya que según ha dicho la actual crecida no debe causar daños ni inundaciones, salvo algún campo que se pueda anegar sin daños relevantes.


Pero si se confirma la llegada de nuevas lluvias y un deshielo más intenso, "sí nos podríamos encontrar ya con una avenida de carácter extraordinario, que afectaría en el caso de Aragón principalmente al eje del Ebro", ha manifestado.


Sin embargo, De Pedro ha agregado que hay que estar atentos a la situación, porque todavía es pronto para saber como va a evolucionar, aunque en el caso de que se produjera una avenida extraordinaria no sería de gran entidad.


En este sentido, ha informado de que a lo largo de mañana y pasado mañana podrán tener pronósticos más precisos, de tal forma que se pueda coordinar la información con servicios de protección civil y con responsables municipales de las posibles poblaciones afectadas.


Respecto a Zaragoza, ha informado de que la punta de la actual crecida ordinaria se prevé que llegue este viernes por la tarde y que se mantenga en el tiempo como consecuencia de las lluvias que se van incorporando de manera constante.


En estos momentos, el Ebro a su paso por la capital aragonesa alcanza los 2,78 metros de altura y un caudal de 793,40 metros cúbicos por segundo, superando ya los máximos del pasado año, que fueron de 2,70 metros y 774,92 metros cúbicos por segundo, que se alcanzó el día 23 de octubre, según los datos del Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) de la cuenca.


Y con las lluvias del fin de semana podría haber otra avenida, con una punta más importante, pero ya el lunes, aunque ha insistido en que habrá que esperar para analizar y ver como se van sucediendo los acontecimientos.


Asimismo, el presidente de la CHE ha señalado que el organismo de cuenca está utilizando los instrumentos de que dispone para este tipo de situaciones, como son fundamentalmente los embalses, realizando operaciones de embalse y desembalse.


En este sentido, ha informado de que hay unos embalses que están teniendo una especial actividad como es el de Ullibarri; el de Itoiz, en el que se está reteniendo todo el agua posible, y el de Yesa, donde se están produciendo desembalses con el fin de dejar el hueco suficiente ante la previsión de nuevas aportaciones importantes como consecuencia de las lluvias que se esperan para el fin de semana.


"Vamos a seguir en esta línea, a estar atentos a la evolución de los acontecimientos y a esperar que no sean unas riadas o unas avenidas que causen importantes daños", ha agregado.