Zaragoza

CHA solicitará una calle a Santiago Carrillo

Juan Martín ha justificado esta petición al apreciar que Santiago Carrillo se ha caracterizado por la "lucha de las libertades públicas y los derechos fundamentales".

Santiago Carrillo.
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EFE

El portavoz del grupo municipal de CHA en el Ayuntamiento de Zaragoza, Juan Martín, ha anunciado que solicitará en el próximo pleno que se inicien los trámites para dedicar una calle al ex secretario general del PCE, Santiago Carrillo, fallecido este martes.


Martín ha justificado esta petición al apreciar que Santiago Carrillo se ha caracterizado por la "lucha de las libertades públicas, los derechos fundamentales y la contribución a la creación de un Estado democrático en España".


Santiago Carrillo Solares nació en Gijón (Asturias) el 18 de enero de 1915, donde pasó buena parte de su infancia. A los nueve años, se trasladó a Madrid junto al resto de su familia, cuando su padre fue nombrado dirigente nacional de PSOE y UGT.


Con la llegada de la II República, se encuadró en la minoría revolucionaria del Partido Socialista y en 1934 fue nombrado secretario de las Juventudes Socialistas. Ese mismo año empezó a colaborar estrechamente con el líder revolucionario del PSOE Largo Caballero y participó en la Revolución de 1934.


Por ello, Carrillo fue detenido y no salió de la cárcel hasta 1936. Ya en libertad, los representantes de la Internacional Comunista le propusieron viajar a Moscú para negociar la unificación de Juventudes Comunistas y Juventudes Socialistas. De la URSS, volvió al frente de las Juventudes Socialistas Unificadas.


Durante la Guerra Civil, Carrillo abandonó el PSOE y se afilió al PCE y fue nombrado consejero de Orden Público por la Junta de Defensa de Madrid. Para evitar que el ejército de Franco ampliase sus efectivos, la Junta de Defensa decidió evacuar en convoyes a los presos de las cárceles madrileñas, así como a todos aquellos civiles y militares afines a los nacionales.


Diversos miembros del ejército republicano desalojaron esos autobuses y fusilaron a sus pasajeros en Paracuellos del Jarama (Madrid). Carrillo siempre negó su participación, aunque desde la derecha siempre se le acusó de haber amparado o permitido los fusilamientos.


En 1939, Carrillo se refugió en Francia después de la victoria del general Franco y desde el exilio encabezó la lucha contra el régimen. En 1976, meses después de la muerte de Franco, regresó a España de manera clandestina para forzar al Gobierno de Adolfo Suárez a negociar la legalización del PCE, hecho que ocurrió en abril de 1977, siendo Carrillo elegido diputado por Madrid en las primeras elecciones democráticas.


Tras su expulsión del PCE en 1985, un año más tarde, Carrillo fundó el Partido de los Trabajadores de España-Unidad Comunista (PTE-UC), que no logró buenos resultados electorales.


Carrillo abandonó la política activa y se dedicó a escribir, dar conferencias y participar en programas radiofónicos hasta el final de su vida. En 2005, fue investido Doctor Honoris Causa por la Universidad Autónoma de Madrid.


Entre sus obras como escritor, destacan 'Después de Franco, *qué?' (1965); 'Memorias' (1993); 'La Segunda República. Recuerdos y reflexiones' (1999); 'La crispación en España. De la Guerra Civil a nuestros días' (2008), y 'Dolores Ibárruri. Pasionaria, una fuerza de la naturaleza' (2008), entre otros.