La DGA ha concedido este curso 11.633 becas para la adquisición de material curricular, una cifra similar a la cantidad de solicitudes denegadas (10.097) y ampliamente superada por el número de alumnos que, cumpliendo los requisitos, se han quedado fuera (22.670).

El cupo de solicitudes pendientes ha aumentado tras la revisión del proceso de baremación que hubo el pasado mes de julio. A raíz de este error en la información fiscal, la publicación de las listas definitivas se retrasó hasta este viernes, dejando a la espera a más de 33.000 familias. Los libreros alertan de que, debido a esta tardanza, "va a haber problemas" y advierten de una posible "avalancha" para la recogida de libros de texto.

"Tenemos bastantes reservas pendientes de resolucion de beca sin recoger, aunque viendo la clientela que solemos tener hemos calculado que haya libros para ellos porque sabíamos que estaban a la espera", explica Óscar Martín, de la Librería Siglo XXI. Para hacer frente al "aluvión" de clientes que se acercarán al establecimiento a partir de este lunes han habilitado una fila especial para facilitarle el servicio a las familias con becas. Además -añaden- "hemos ampliado la plantilla para agilizar la venta en estas dos semanas" pues calculan que entre 500 y 600 lotes están pendientes de recoger.

Aparte de las reservas -señalan desde la Asociación de Librerías de Zaragoza- se ha contado con "la previsión de venta de nuestros colegios del área de influencia", de manera que los libreros de la capital esperan tener libros "si no para todos, para la mayoría". Para el que venga esta semana -añaden- lo "normal" es que tenga que esperar 7 días para poder recoger su encargo.

En la Librería Central las reservas se cogían hasta el 10 de agosto. "Hasta entonces había gente que había solicitado la beca y gente que no. Los que no la habían solicitado han ido viniendo estos días, pero ahora faltan por venir todos los que recogerán el cheque a partir de este lunes, que se van a mezclar con los que se examinan en septiembre", apunta Ana Navarro, encargada de libros de texto. Según precisa, hasta ahora han recibido unos 4.000 pedidos y calcula que en las próximas semanas -entre los de septiembre, los de las becas y algún despistado- podría haber más de 2.000 encargos. "Va a ser una semana muy movida", confiesa.

Desde la Librería General prevén que "las editoriales se van a atascar también" porque -según advierten- "somos mucha gente pidiendo a la vez". En esta librería, adscrita al programa de ayudas de la DGA, aseguran que no van a subir el IVA "y habrá otras muchas que tampoco", apostillan.

Tampoco las librerías de barrio dan abasto estos días. En la Librería Babel, en el zaragozano barrio de Valdefierro, Eduardo Aísa lleva atendidos hasta la fecha más de 1.000 pedidos. Cuenta que con la subida del IVA en material escolar ha recibido "un montón de gente" en agosto, pero -asegura- que, en su caso, no lo va a subir hasta enero. Para evitar la "avalancha" de clientes este mes, recomendó a los vecinos del barrio "que, tuvieran beca o no, fueran encargando los libros". Por eso, cree que la mayoría de los pedidos los tiene ya en tienda. "Hemos intentado que la gente que realmente quisiera comprar aquí los libros, los encargara; lo de menos era cómo abonarlos. Muchos de los que estaban pendientes de la resolución los tienen ya aquí, otra cosa es cómo los paguen", indica.

Un banco de libros

Por su parte, las asociaciones de padres han impulsado ya sus propias iniciativas para evitar el "colapso", y que muchos niños empiecen el colegio sin libros. "Nosotros fomentamos bancos de libros en las AMPAS para paliar este problema que se le va a venir encima a muchas familias. Hemos creado un programa de préstamo con los libros que teníamos el año pasado. Luego si alguna familia tiene que adquirir material nuevo, habrá que poner un pequeño fondo", explican desde FAPAR.

En cualquier caso -aseguran- "el listado ha salido muy tarde", lo que se convierte en otro problema añadido a la "insuficiente" partida de ayudas. "Este lunes tienen que tener los cheques en los centros para que las familias vayan a buscarlos, así que irán en avalancha a las librerías para recoger el material. Pero, ¿habrán reservado, no habrán reservado, habrá material para todo el mundo? Es una incógnita para todos", manifiesta Nieves con preocupación.

Desde FECAPARAGÓN se muestran más comprensivos: "Entendemos que en el tema de los libros puede haber soluciones no tan problematicas como en el caso del comedor", donde sí han expresado su "decepción absoluta por que el Gobierno publique unas listas definitivas y no saque una solución paralela". En el caso del material curricular, recomiendan a las familias que conserven las facturas para poder reclamar y confían en que las comunidades educativas puedan trabajar con todas las existencias de libros que hay actualmente. "Salimos de un sistema de préstamos que, con una buena gestión, podemos sacar adelante este curso", añaden optimistas.