Más de un centenar de trabajadores del sector ferroviario de Aragón se han concentrado este viernes en la Estación Delicias de Zaragoza en defensa de un "ferrocarril público y social". Trabajadores y sindicatos muestran así su rechazo al proyecto de reforma ferroviaria aprobada por el Gobierno, que fija en julio de 2013 la apertura a la competencia del transporte de viajeros en tren y contempla la división de Renfe en cuatro empresas.

La concentración, en la que se han coreado lemas como "ministra, atiende, el tren no se vende", "Gobierno dimisión por fascista y por ladrón" o "Mariano, idiota, el tren no se toca", ha transcurrido pacíficamente, si bien se han lanzado varios petardos sin que haya que lamentar ningún daño personal ni material.

Óscar Martínez, presidente del Comité de Empresa de UGT Adif, ha denunciado que la privatización supone "el desmantelamiento de Renfe como empresa pública", algo que -asegura- "no será beneficioso para el usuario, como hemos podido comprobar en otras privatizaciones, como la telefonía o la energía".

A su juicio, esto va a suponer que empresas de ferrocarril extranjeras entren a España en "competencia desleal", porque Renfe no puede entrar en esos otros estados.

En este sentido, Martínez ha afirmado que las movilizaciones van a seguir mientras no haya otra salida negociada y que, además, se les sumarán trabajadores de otras empresas auxiliares.

Asimismo, ha asegurado que "la incidencia al ciudadano no ha sido mucha por los servicios mínimos", que ha calificado de "abusivos y anticonstitucionales" por llegar a alrededor del 80% de la plantilla, según sus datos.

Nos obstante, el presidente del Comité de Empresa de UGT ha querido dejar claro que el 90% se ha sumado a la huelga.

Además, ha anunciado que se unirán a la movilización prevista en Madrid para el día 15 y que si no hay una voluntad "real, clara" de modificación, el 17 de septiembre habrá posiblemente otra huelga de 24 horas, a la que se podrán unir empresas auxiliares del sector.

Por su parte, Santos Paricio, secretario general de la Federación de Transportes de UGT Aragón, ha exigido un ferrocarril público que vertebre todo el territorio de Aragón" y ha comparado esta privatización con la llevada a cabo con anterioridad en el Reino Unido, que ha calificado como "un desastre".

En este sentido, ha afirmado que "temen por el cierre total" de las líneas que no sean rentables, como las regionales que unen Zaragoza con Binéfar o Teruel, y ha negado que la privatización vaya a repercutir en un coste más asequible del AVE.