Tres candidatos con las mismas preocupaciones

Sin prisas, pero con muchas pausas. El pabellón municipal de Montañana registró durante toda la mañana electoral un goteo más que intermitente de los vecinos que se acercaban a votar. Sin filas ni agobios, ni siquiera hubo oportunidad para el chascarrillo. "La anécdota más destacable es que no ha pasado nada", relataban, pasado el mediodía, las relajadas interventoras.

Lógico, por otra parte, si se tiene en cuenta que a las 12.30, a escasos minutos del vermú, apenas habían pasado por las mesas 215 de los 2.690 vecinos con derecho a voto en las elecciones a la alcaldía del barrios rurales. Montañana, igual que otras trece pedanías, celebraba el lunes unas jornadas que, hasta cierto punto, pasaron desapercibidas. "La verdad es que tampoco le damos demasiada importancia a estas elecciones, aquí nos conocemos todos y acabas votando a la persona más que al partido, porque entendemos que se depende de Zaragoza para todo", esgrimía un matrimonio en la puerta del centro electoral.

Junto a los electores, como uno más, se podía encontrar a los tres candidatos tomando café en el bar anexo o departiendo con los montañaneses congregados en el polideportivo. Tras charlar con ellos, la conclusión era más que evidente: las propuestas de los tres partidos que concurrían a los comicios eran prácticamente similares.

Antonio Sabaté (PSOE), Emilio García (PP) y Ángel Sierra (CHA) esgrimieron, uno por uno, su visión acerca de las necesidades del barrio. A grandes rasgos, la terna coincidía en los puntos básicos: horario y ampliación del consultorio médico, accesos y conexiones del barrio y ocio y cultura para jóvenes y mayores. Sierra profundizaba algo más al explicar la necesidad de "atraer a pequeñas y medianas empresas de fuera" o "conseguir que el agua de ciudad llegue a todas las casa".

Aunque unos lo digan más alto que otro, también armonizaban en que el principal problema deriva del estrecho margen de maniobra del que las pedanías disponen respecto del Consistorio zaragozano.

En el fondo, tal como señalaba el candidato popular, los progresos de los barrios rurales únicamente se consiguen a través del trabajo en equipo: "Aquí sabemos que solo juntos podemos conseguir algo". Una idea plasmada en el trato cordial que se profesaban unos a otros durante las horas iniciales de la jornada.

Campaña electoral 'de guerrilla'

Con un presupuesto ajustado como consecuencia de la coyuntura económica, la mercadotecnia de campaña se redujo al tradicional buzoneo, en el caso de PSOE y CHA, y a un par de encuentros con simpatizantes, así como una furgoneta propagandística, por parte de la candidatura popular.

Sube la participación respecto a 2007

Según señalaban desde el Ayuntamiento de la capital aragonesa, la participación en la encuesta de alcaldes de barrios rurales a las 14.00 ascendía al 13,21%. En 2007, cuando se llevaban tres horas de consulta, la participación era del 12,80%.