EN UN CLUB DE ZARAGOZA

Desarticulada una red dedicada a la explotación sexual de nigerianas

La víctima debía abonar semanalmente un mínimo de 300 euros para pagar su deuda y recibía palizas por no hacerlo, y hasta ahora había pagado 19.250 euros.

La Policía Nacional ha desarticulado una red organizada dedicada al tráfico ilegal de mujeres nigerianas para su explotación sexual en España, una operación que ha concluido con la detención de tres mujeres de esta misma nacionalidad.


Las investigaciones -iniciadas y desarrolladas por funcionarios de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de Zaragoza- determinaron que en un club de la calle Cerezo de la ciudad había una mujer que podía ser víctima de trata de seres humanos para explotación sexual.


En la inspección practicada en el local se detectó la presencia de esa mujer, identificada como J.O., natural de Nigeria y de 30 años, quien confesó a la Policía haber sido captada en su país de origen y trasladada a esta ciudad para los fines reseñados, informa la Jefatura Superior de Policía de Aragón.


Se pudo determinar que dos personas le facilitaron todo lo necesario para entrar en España (pasaporte, visado y billete de avión, y cierta cantidad de dinero) y fue aleccionada sobre las posibles preguntas a que sería sometida a su paso por la frontera aeroportuaria.


La víctima fue advertida de que había contraído una deuda de 50.000 euros y para asegurar la devolución del dinero y que no denunciara a la policía fue sometida al rito del vudú nigeriano "juju", haciéndole creer que es un hechizo que no puede romper, que puede matarla si trata de escapar y hacer daño a su familia.


Una vez en Zaragoza fue recibida por un varón que actualmente cumple condena en la prisión de Zuera por otras causas, quien le retiró el pasaporte y le comunicó su deuda de 50.000 euros y que se tenía que dedicar a la prostitución.


Se encargó de ella la esposa de este hombre, ahora detenida y quien percibía los beneficios económicos de la prostitución.


También se ha detenido a G.S., amiga de la anterior y encargada de vigilar a la víctima en el club y de las actividades que esta desarrollaba, y L.F.J., otra pieza más utilizada por la organización como medio coactivo, ambas e nacionalidad nigeriana.


Las tres han sido detenidas como supuestas autoras de los delitos de asociación ilícita, contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, favorecimiento de la inmigración ilegal, prostitución coactiva y blanqueo de capitales, y pasaron a disposición judicial este miércoles.


Las mismas fuentes indican que se da la circunstancia de que las tres detenidas pasaron por lo mismo y llevaban varios años ejerciendo la prostitución, pero una vez que pagaron su deuda pasaron a participar en la explotación de nuevas chicas.


La víctima debía abonar semanalmente un mínimo de 300 euros para pagar su deuda y recibía palizas por no hacerlo, y hasta ahora había pagado 19.250 euros. La mayor parte del dinero recaudado era enviado a Nigeria a través de diversas empresas de transferencias.


La Unidad Contra Redes de Inmigración Ilegal y Falsificaciones (UCRIF) de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de Zaragoza continúa las gestiones para el total esclarecimiento de los hechos investigados, así como a la búsqueda, localización y detención del resto de los responsables de los mismos.