NORMATIVA MUNICIPAL DE ZARAGOZA

Multa a un peatón por cruzar un semáforo en rojo... a las 3.00

La Policía Local sancionó por esta conducta a un joven hace unos días. Con la normativa en la mano, la sanción es totalmente lícita, aunque desde el Ayuntamiento afirman que este tipo de multas no se imponen habitualmente.

El paso de cebra de la plaza de San Sebastián con la calle de San Ignacio de Loyola
Multa a un peatón por cruzar un semáforo en rojo... a las 3.00
M. T.

Centro de Zaragoza. Las 3.00 de un sábado cualquiera. Un grupo de jóvenes zaragozanos salen a la calle tras tomarse algo en un bar. Miran a un lado y otro de la calle y, tras cerciorarse de que no venía ningún vehículo, todos cruzan la calle por un paso de peatones. Continúan su camino con normalidad hasta que se les acerca una pareja de agentes de la Policía Local de Zaragoza: habían cruzado con el semáforo en rojo y esta es una conducta que se sanciona en la normativa municipal.


"Es la típica leyenda urbana que oyes alguna vez y que no te crees... hasta que te pasa", dice uno de los jóvenes protagonistas de esta historia. El grupo que cometió la infracción ascendía a ocho personas, explica el joven, pero solo a él se le impuso una multa en ese momento, aunque luego los agentes identificaron a, al menos, otras tres personas más que todavía no han recibido notificación alguna de sanción.


Los jóvenes, explica el sancionado, protestaron airadamente la sanción a los agentes de la Policía Local y una patrulla de la Policía Nacional tuvo que acudir hasta el punto donde se había cometido la infracción, la plaza de San Sebastián. El importe de la sanción no fue ni muchos menos lo que provocó la protesta, porque la multa ascendía a 18 euros aunque con el 'pronto pago' se queda en 9 euros.


"Lo que nos molestó", explica el joven que prefiere mantener el anonimato, "es que es una injusticia porque hay cosas más importantes de las que la Policía Local debería estar pendiente". Además, explica, esta es una conducta que todos los días los peatones cometen una y otra vez y no se sanciona. Se siente un poco agraviado.


Y su indignación no acaba aquí, porque explica que en la sanción, que fue redactada por los agentes locales 'in situ', "no aparece el lugar correcto de la infracción", es más, "aparece un lugar inexistente". "Nos quejamos y nos dijeron que era simplemente un defecto de forma", añaden.


El joven cuenta que el papel de la denuncia no parece ser propio de este tipo de infracciones "porque aparecía el campo 'Matrícula'". Esto es algo que descolocó a los agentes, "que no sabían qué poner" y acabaron rellenando este espacio con el número de D. N. I. de los sancionados.

Concienciación antes que penalización


"No se suelen poner multas a las peatones", dicen desde el Ayuntamiento de Zaragoza. "Las multas no es un concepto con el que se esté trabajando” en este tipo de infracciones, explican, para añadir que “se realiza más una labor pedagógica que punitiva". Esta intensa labor tiene su razón, sin duda, en que los atropellos son la primera causa de muerte por accidente de tráfico en la ciudad, como así refieren numerosos informes realizados por la Dirección General de Tráfico (DGT) y otros organismos que trabajan en pro de la seguridad vial.


La Policía Local lleva a cabo campañas de concienciación: "Si hay un policía vigilando la zona le informan al peatón de que está poniendo en juego su seguridad, porque es la parte más débil, además de que puede provocar un accidente", ilustran fuentes consistoriales.

Sanciones más elevadas en otras ciudades


El pasado año en Barcelona crecieron un 15% los accidentes de peatones que se saltaron un semáforo y también aumentó el número de denuncias. La mayoría de las multas, que pueden alcanzaron de media los 30 euros, fueron por cruzar la calzada ignorando un semáforo en rojo, o por hacerlo fuera del paso de peatones, y circular por el carril bici y/o permanecer en él.


En Bilbao, la multa alcanza los 80 euros si es una infracción leve, que se quedaría en 56 euros con descuento por pagar antes de un mes. La cuantía puede ascender hasta 150 euros si se trata de una infracción grave, es decir, cuando un peatón provoca un accidente.


En los últimos meses, también se han impuesto sanciones en Lérida (90 euros), Vigo (80 euros), Jerez (96 euros) o Estella (Navarra), donde la multa alcanzó los 200 euros por pasar repetidas veces el paso de peatones con el semáforo en rojo.