FUNCIONAN DESDE 2008

Los Ebrobuses tienen menos de la mitad de usuarios que el año pasado

La empresa achaca la bajada de clientes a que la temporada empezó más tarde y a que algunos días no han podido navegar.

Un Ebrobús parte sin clientes del embarcadero de Vadorrey.
Los Ebrobuses tienen menos de la mitad de usuarios que el año pasado
OLIVER DUCH

La actual temporada de navegación fluvial por el Ebro, aún sin concluir, va camino de ser la peor desde que este servicio se puso en marcha en el verano de la Expo. Según datos facilitados por la empresa concesionaria de los Ebrobuses, Turismo Ebro Fluvial, entre junio, julio y agosto se subieron a sus barcos unas 3.000 personas, menos de la mitad de las que lo hicieron el año pasado. Estas cifras arrojan una media de unos 35 pasajeros al día entre las cinco salidas diarias que se hacen entre semana y las nueve de los sábados y domingos.


La compañía que lleva la navegación fluvial pone varias justificaciones a estos datos. Para empezar, que la campaña de este año empezó 20 días más tarde que la de 2010 por el exceso de caudal que llevaba el Ebro. Además, ha habido días en los que el servicio se ha interrumpido total o parcialmente. A comienzos de este mes no hubo navegación durante toda la semana porque se estropearon los motores de los dos Ebrobuses disponibles; y a comienzos de agosto, la falta de caudal hizo que el canal de navegación creado para los barcos no tuviera el calado suficiente como para que los barcos llegaran hasta el embarcadero de la Expo, por lo que solo pudieron hacer el recorrido Vadorrey-Náutico.


Con todo, la ocupación de los Ebrobuses este año ha caído en picado si se compara con los datos que el año pasado facilitó Jerónimo Blasco, consejero municipal de Cultura y, entonces, de Grandes Proyectos. Blasco dijo el 22 de septiembre de 2010 que hasta la fecha se habían subido a los barcos 9.101 pasajeros, de los que 1.548 lo hicieron con los viajes promocionales a un euro. Por lo tanto, 7.553 personas pagaron su entrada entre junio, julio, agosto y principios de septiembre del año pasado.


Este año, entre junio, julio y agosto se han vendido alrededor de 3.000 billetes, una cifra que difícilmente se habrá arreglado en este inicio de septiembre -aún no hay datos de este mes-, teniendo en cuenta que no ha habido servicio durante una semana entera. Además, en estas cifras se incluyen los datos de la última semana de junio, en la que se lanzó una campaña de promoción con los viajes a la mitad de precio. No están contabilizados, en cambio, los 5.000 vales gratuitos que se han repartido por hoteles y comercios de la ciudad, merced a diversos acuerdos firmados por Turismo Ebro Fluvial. Estos permiten hacer gratis el recorrido entre un embarcadero y el siguiente.


Esta campaña va camino de convertirse, de largo, en la peor de la corta -pero agitada- historia de los Ebrobuses. En 2009, por ejemplo, el 18 de agosto se habían montado en los barcos turísticos 3.805 personas, unos 800 más que las que se han montado este año hasta finales del citado mes. En 2008, año de la Expo, según las cifras oficiales se subieron en los Ebrobuses 21.000 personas -luego el Consistorio rectificó y las bajó a 12.000-. El Ayuntamiento tuvo que subvencionar el servicio esa temporada con 300.000 euros, ya que la afluencia prevista para el año de la muestra internacional era de 350.000 usuarios.


Los responsables de Turismo Ebro Fluvial no saben a estas alturas si solicitarán este año subvención al Ayuntamiento o no. "Aún estamos a mitad de temporada", señalaron. Lo que sí descartaron prácticamente es pedir indemnizaciones por no poder llegar hasta la Expo por el escaso calado del canal de navegación. "Es muy complicado", valoraron.


La temporada se mantendrá, como todos los años, hasta después del Pilar. En principio, el día 16 de octubre será el último de esta campaña.