El Puesto de la Guardia Civil de Daroca recibió entre los días 13 y 17 de julio siete denuncias por robo con fuerza en varias viviendas próximas a los apeaderos de Villareal de Huerva y Badules. Ambas eran utilizadas como segunda vivienda por sus propietarios.

La Guardia Civil llegó a la conclusión, tanto por la franja horaria en la que se producían los robos como por las viviendas que eran objeto de los mismos, de que los posibles autores se desplazaban hasta estos lugares en el último tren del día, aprovechando las primeras horas para seleccionar aquellas viviendas que en esos momentos no estuviesen habitadas.

Por estos motivos, este lunes la patrulla de servicio de seguridad ciudadana perteneciente al puesto de Daroca, estableció un dispositivo de seguridad para la vigilancia alternativa de los apeaderos de las localidades de Villareal de Huerva y Badules.

En torno a las 21.00, cuando la patrulla se encontraba en la proximidades del apeadero de la localidad de Badules, observaron como dos personas descendían del convoy y con actitud sospechosa y de forma inmediata, se agazapaban detrás de unos setos situados bajo las ventanas de las viviendas próximas, desapareciendo de la vista de los agentes, lo que motivó que la patrulla se dirigiese hacia el lugar.

Al detectar la presencia policial, estas dos personas se dirigieron al andén del apeadero, manteniéndose a la espera en la marquesina como si se tratase de viajeros. Fue en este momento cuando la patrulla se acercó a ellos a fin de identificarlos e interesarse por el motivo de su presencia en el lugar, observando en este momento como una de estas personas, de forma disimulada, introducía un destornillador de grandes dimensiones en la mochila que portaba.

En el momento de la identificación, la patrulla de servicio les pidió que mostraran el contenido de la mochila que portaban, encontrando en su interior dos destornilladores de grandes dimensiones, dos linternas, dos pares de guantes y ropa de abrigo de color oscuro.

Dado todo lo anterior y, ante la sospecha de que durante el tiempo que permanecieron fuera de la vista de los agentes, hubieran podido intentar algún tipo de delito, los agentes realizaron una inspección ocular por las inmediaciones de las viviendas, pudiendo observar daños recientes en las mosquiteras de protección de dos de las ventanas así como daños en la madera de las mismas, posiblemente fruto del intento de forzamiento para su apertura, sin llegar a producirse esta.

Por estos motivos, se procedió a la detención de V. B., de 41 años de edad y vecino de Cariñena, y de C. M., de 38 años de edad, ambos de nacionalidad rumana, como presuntos autores de un delito de robo con fuerza en las cosas en grado de tentativa. Los detenidos fueron puestos a disposición judicial el 19 de julio.

Continúan las investigaciones por si pudieran estar implicados en otros delitos del mismo tipo ocurridos en esta zona.