El PAR defiende la colaboración público-privada para financiar el campo

El consejero municipal de Deportes del Ayuntamiento de Zaragoza, Manuel Blasco, se decanta por el contrato de colaboración público-privada como el más oportuno para pagar el nuevo campo de fútbol, una opción que, no obstante, dependerá de la posición que adopte el Gobierno de Aragón.

De momento, la decisión del Gobierno de la ciudad es aplazar la licitación del proyecto de construcción del nuevo estadio hasta después de las elecciones municipales, ya que también se espera la decisión del Real Zaragoza para contribuir a la financiación, con lo que las obras no empezarían antes de seis meses tras el periodo electoral.

Así lo ha explicado Blasco en una rueda de prensa posterior a la reunión del Gobierno de la ciudad, en la que se ha dado cuenta del estudio de viabilidad sobre el nuevo estadio, el primero de esas características que se realiza para analizar la fórmula de financiación del nuevo estadio y que ha costado 190.000 euros.

Según ha señalado Blasco, el error de los proyectos anteriores para construir en Zaragoza un nuevo estadio, en alusión al que promovieron PP-PAR en Valdespartera, y al que impulsaron después PSOE-CHA en La Romareda, es que «se había corrido demasiado» y no se habían tenido en cuenta algunos aspectos y «nos ha ido como nos ha ido».

El edil ha insistido en que los principios del Ayuntamiento siguen «siendo los mismos, que no genere deuda, que se pueda contar con la colaboración de la empresa privada y que no es necesario precipitarse».