operación contra las drogas

Detenidos cuatro traficantes implicados en un homicidio en Zaragoza

Cuatro personas de origen marroquí pertenecientes a un grupo de narcotraficantes de hachís fueron detenidas por su implicación en la muerte del cocinero retirado Luis García Bernal que fue hallado muerto en su cama a causa de una brutal paliza que le desfiguró el rostro.

Cuatro personas, integrantes de un grupo organizado dedicado a la distribución de hachís en Zaragoza, han sido detenidas por su presunta implicación en el homicidio de Luis García Bernal, ocurrido el 21 de junio de 2009 en el barrio de La Magdalena de la capital aragonesa.


Según ha informado la Jefatura Superior de Policía de Aragón, los detenidos son cuatro hombres de nacionalidad marroquí de edades comprendidas entre los 20 y 34 años que presuntamente suministraban hachís al fallecido, cocinero retirado de 51 años que se dedicaba a su vez al menudeo de drogas.

Los detenidos están en prisión

La operación contra los cuatro detenidos, que ingresaron el pasado fin de semana en prisión tras prestar declaración ante el juzgado de guardia, permitió a los agentes intervenir más de 61 kilogramos de hachís, 21.700 euros en metálico, 30 móviles, 17 tarjetas de diferentes operadoras, un ordenador portátil y tres vehículos.


Las investigaciones en torno a este grupo de narcotraficantes, tres de ellos hermanos, se iniciaron a raíz del crimen de Luis Bernal, hallado muerto en su cama a causa de una brutal paliza que le desfiguró el rostro. La inspección ocular realizada por los agentes en el domicilio del fallecido permitió a los agentes constatar que los autores del crimen le habían sustraído la droga y dinero que guardaba.


Los investigadores del grupo de homicidios averiguaron, posteriormente, que el crimen no sólo guardaba relación con la actividad de tráfico que realizaba la víctima sino que en el suceso podían estar implicados los integrantes del grupo que le suministraban el hachís.


Tras prestar declaración, la titular del juzgado zaragozano encargado de la investigación dictó orden de prisión para los cuatro detenidos por un presunto delito de tráfico de drogas en la capital aragonesa.


El registro de un móvil sustraído a la víctima, localizado tres meses después en poder de un inmigrante ganés, permitió la identificación de los sospechosos y abrió nuevas vías para el esclarecimiento de los hechos.