La Asociación de Víctimas del Terrorismo rindió ayer homenaje a las víctimas del atentado con coche bomba que ETA cometió hace 24 años en Zaragoza contra un autobús de la Academia General Militar en la plaza de César Augusto, frente a la iglesia de San Juan de los Panetes. En el acto criminal fallecieron el comandante militar Manuel Rivera Sánchez y el conductor civil Ángel Ramos Saavedra, y resultaron heridos otros 28 militares y 16 civiles que transitaban por la calle.

La iglesia de San Juan de los Panetes fue la elegida para celebrar una misa en recuerdo de las víctimas y también de los supervivientes del atentado, que, por distintas circunstancias, ya han fallecido. Estas personas fueron Marcos Conde Tomás, Manuel Melo Arnás, Enrique Alcaide Ortiz, José Doñate Pesado, Francisco Cabeza Pérez, Fernando Jiménez Yago, Francisco Javier Rodríguez Grima María del Carmen Cebollada Muro. El homenaje se hizo extensivo no solo a los damnificados por este atentado, sino a todas las personas que han padecido la lacra del terrorismo en España.

En el autocar, a cuyo paso ETA colocó el coche bomba con 50 kilos de amonal y 100 de metralla, iba José Marco Jalle, actualmente delegado en Aragón de la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT), entidad que organizó el homenaje. Marco manifestó ayer que, a pesar de que los años van pasando, es bueno no olvidar que hubo un tiempo en que había atentados, por desgracia, con mucha frecuencia.

Al acto asistieron el delegado del Gobierno en Aragón, Javier Fernández, y el general jefe de la 8ª Zona de la Guardia Civil en Aragón, Germán Gómez.