Nueva noche de contenedores quemados y vandalismo en las calles de Zaragoza. En esta ocasión, todo sucedió en el barrio de Torrero-La Paz, sobre las 3.00, cuando los Bomberos recibieron el aviso de que un incendio estaba propagándose frente al número 6 de la calle de Zafiro.

Para cuando llegaron hasta el lugar, ardían pasto de las llamas cinco contenedores de recogida selectiva de basura y otros dos vehículos, hasta los que el fuego se había propagado. Aunque los depósitos de basura quedaron calcinados y los automóviles sufrieron daños importantes no fue necesario desalojar a ningún vecino de la finca más cercana al incendio.

"Ha sido muy aparatoso, porque las llamas han alcanzado mucha altura, pero no ha habido que lamentar daños personales. Todo parece indicar que ha sido intencionado", señalaron fuentes de los Bomberos. Afortunadamente, recibieron el aviso a tiempo y actuaron con mucha rapidez. En media hora aproximadamente lograron controlar el fuego.

La Policía Nacional ya ha abierto una investigación para esclarecer las causas del siniestro, pero aún no se han producido detenciones.

Los contenedores fueron repuestos solo unas horas después, y a primera hora de la mañana de ayer solo el intenso olor a quemado y la huella de las llamas en el asfalto delataban lo que había sucedido de madrugada.

"La verdad es que muchos no nos hemos enterado de que han venido los Bomberos", reconocía un vecino de la finca que está pegada al lugar. La calle Zafiro no es muy estrecha y había espacio entre los 'contáiners' y la fachada, lo que facilitó que las llamas no se introdujeran en los pisos, aunque el humo ennegreció ligeramente una de las paredes. Solo en dos terrazas ubicadas en las plantas más bajas acusaron más el efecto del fuego.

Durante la noche, los Bomberos intervinieron además en el incendio de otro turismo ocurrido en la calle de Monasterio de Samos, en el barrio de Las Fuentes, aunque en esta ocasión podría tratarse de un fallo eléctrico.

Goteo de casos

Los Bomberos y la Policía reconocen que, casi cada fin de semana, reciben un goteo de siniestros causados por pirómanos. A menudo son grupos de jóvenes que suelen arremeter contra contenedores, pero que otras veces incendian motos o coches. Actúan en todos los barrios y, sobre todo, de madrugada, tanto de jueves a domingo como cuando hay jornadas festivas.

El mes pasado, los vándalos incendiaron 4 contenedores en Duquesa de Villahermosa y, de nuevo, las llamas afectaron también a vehículos. Poco antes, habían ardido otros 4 en Casablanca. Estos contenedores tienen una capacidad de 3.200 litros, un 30% más de los que había hace dos años. Cada uno que hay que reponer cuesta 700 euros aproximadamente.