El belén de Zaragoza abrió sus puertas al público con una imagen más espectacular gracias a una vegetación más exhuberante y frondosa, con numerosos árboles de gran porte y edad como un bosque de magnolios y dos grandes superficies con un total de veinticinco olivos, uno de ellos milenario.

Con 2.400 metros cuadrados, el de Zaragoza, instalado frente a la fachada de la Basílica del Pilar, es, según fuentes municipales, el belén más grande de España que se puede visitar.

En su recorrido por el interior, el público encontrará rincones de vegetación espectacular, observará vestigios arqueológicos y, si las palomas lo permiten, el crecimiento de varias especies hortícolas en un pequeño huerto, ha explicado a Efe Javier Ramírez, responsable del Departamento de Producción de Zaragoza Cultural y coordinador del Belén.

Además de los magnolios y los olivos, el recinto está salpicado de washingtonias, encinas, cedros, aligustres, cipreses, olivos y un olmo que cuando se cierre el Belén, el día 9 de enero, se trasladarán a los viveros municipales para aprovecharlos en próximas ocasiones.

Y para recrear el ambiente de la época el visitante se encontrará, además del tradicional portal con el Niño Jesús, la Virgen María y San José, con siete esculturas que representan escenas tradicionales de los oficios aragoneses: un carpintero y su aprendiz, un alfarero con su torno, una familia (padre, madre y niña) de matacía, y un artesano del mimbre elaborando una cesta.

Para su construcción, que comenzó el pasado día 15, se han empleado 1.100 toneladas de tierra vegetal, 700 kilos de piedra rocosa, 820 kilos de laja y 1.200 kilos de arena para configurar los caminos.

Además, se ha creado una lámina de agua de 700 metros de superficie que cuenta con un grupo de empuje de bombas de 1.100 litros por hora.

Este año se ha sustituido el Palacio de Herodes, que se encontraba muy deteriorado, por restos arqueológicos catalogados (basas y columnas) de un palacio renacentista que simula un estado ruinoso.

La visita al Belén se puede completar con un recorrido por las 36 casetas de la Muestra Navideña, en las que hasta el 20 de diciembre se podrán encontrar productos típicos de decoración y gastronomía navideñas y, a partir de esa fecha, juguetes de madera y regalos artesanos, además de chocolate, caldo, castañas, patatas asadas, crepes, gofres o cerveza y salchichas alemanas, entre otras cosas.

O también visitando el Campamento Real, con las carrozas de los tres Reyes Magos, o desde mañana y hasta el día 8 dándose un paseo en dromedario por la Plaza del Pilar.