Falaguera pide soluciones ante la falta de un espacio al que trasladarse

calatayud. Unas 300 personas, entre trabajadores de Conservas Falaguera, familiares y amigos, recorrieron ayer el centro de Calatayud con lemas como "evitemos 50 parados más", "por un Calatayud con industria" o "¿para qué mil palabras?, con dos basta, ¡queremos trabajar!". Así hicieron ver a los responsables municipales y a la sociedad bilbilitana que si esta industria no se reubica en las naves que ha dejado Dana en el polígono de La Charluca, tendrá que cerrar.

Los propietarios de Falaguera iban al final de la marcha. En la cabecera, los miembros del comité de empresa y la concejal sin adscripción política María Amor Muñoz, la única representante del Consistorio que acompañó a los manifestantes.

Conservas Falaguera, con 50 empleados, compite con el proyecto empresarial de Tsia, que ha empezado con diez trabajadores pero tiene previstos 30 para el primer año. Las dos esperan que Dana decida a cuál vende. Los empleados de la conservera han recogido 2.300 firmas y han explicado por carta a la multinacional que su empresa está consolidada y "funciona", argumento que recordaron a los políticos municipales. "Su obligación es apoyar la creación real de puestos de trabajo; si no, para qué queremos a estos políticos, queremos hechos y no palabras", decía el comunicado que leyeron a las puertas del Ayuntamiento. Incidieron en que seguirán unidos para defender sus puestos de trabajo, "con la verdad y el respeto, y no permaneciendo ocultos ni escondidos", refiriéndose a los empresarios locales que sustentan económicamente a Tsia.

Esta circunstancia, con dos proyectos industriales por una misma ubicación, evidencia la falta de suelo industrial en la ciudad. Por eso, la dirección y los empleados de Falaguera piden soluciones. Así se lo han trasmitido a los diferentes grupos municipales en las reuniones que han mantenido. "Pero nos dicen que no tienen dónde ubicarnos", afirmó Carmen Abián, que preside el comité.

Muñoz, por su parte, indicó que el Ayuntamiento no debe decantarse por una u otra empresa si bien apuntó que los trabajadores de la conservera han ido a hablar con ella. "Los proyectos son proyectos, y Falaguera hoy en Calatayud y en la comarca es una realidad", indicó. Ruth Lázaro, la gerente, señaló que llevan diez años buscando alternativas e incidió en que el tejido empresarial que queda es el de empresarios locales, mientras que "cuando se ponen duras los demás levantan el vuelo", como ha ocurrido en estos dos años.