Un nuevo robo, perpetrado en la noche del viernes al sábado en un estanco de Borja, ha disparado la preocupación vecinal en la localidad. A la espera de lo que determine la investigación, la forma de acceder de los ladrones al establecimiento es toda una incógnita pues, según ha podido saber HERALDO, la cerradura del mismo no había sido forzada. Aunque todavía no se han evaluado las pérdidas económicas, el propietario del establecimiento las elevaba por encima de los 20.000 euros en tabaco.

Este estanco, que ha sufrido ya dos robos en poco tiempo, se encuentra en la calle de Joaquín Costa, a escasos metros de la plaza de España.

El pasado miércoles el alcalde de Borja, Eduardo Arilla, hizo público un bando en el que señala que "ante los últimos intentos de robo sufridos en la ciudad se requiere la colaboración de todos los vecinos" para que estén "alerta" y den cuenta inmediata a las autoridades de cualquier persona o vehículo sospechoso que puedan observar llamando a los teléfonos de la Policía Local o de la Guardia Civil, que se indican en la comunicación vecinal.

Y es que, en los últimos meses se ha incrementado notablemente el número de delitos contra la propiedad. Hace unos días se perpetró un robo en una vivienda y el pasado mes fue saqueada una tienda almacén de calzado con importantes pérdidas económicas y se asaltaron varias viviendas en una urbanización, además del robo de dos vehículos oficiales del departamento de Agricultura del Gobierno de Aragón que estaban recogidos en el parque de Bomberos Voluntarios. A esto hay que sumar los robos en un almacén de fontanería en el polígono industrial y en una distribuidora de alimentos y bebidas.

Asimismo, a una vecina de Borja intentaron arrebatarle de un tirón el bolso en pleno centro de la ciudad y aunque no lo consiguieron, la mujer acabó en el suelo. Pero el caso más alarmante ocurrió en mayo cuando un encapuchado armado con una pistola atracó otro estanco situado a muy pocos metros del Ayuntamiento, en la zona peatonal y a media tarde.

El primer edil borjano mostró su preocupación: "Tenemos un repunte de delincuencia y una intranquilidad de la ciudadanía". Además, afirmó haber adoptado algunas medidas, entre ellas la petición de la colaboración ciudadana "que es vital" y un plan de seguridad nocturna que incluye un operativo especial montado por la Guardia Civil.

Según Arilla, "los vecinos tienen que confiar en los Cuerpos de Seguridad y, sobre todo, colaborar al máximo posible como medida de prevención y disuasión ante nuevos delitos". El alcalde aseguró que "estamos ante profesionales del robo", pero se mostró "convencido" de que serán "detenidos y puestos a disposición de la Justicia".

En estos momentos Borja, con poco más de 5.000 habitantes, cuenta con 8 agentes de la Policía Local que "patrullan las 24 horas del día", indica Arilla, además de la Guardia Civil. Precisamente por ello, hay ya muchos vecinos que no entienden qué es lo que está sucediendo y expresan públicamente su malestar por la situación.