El delegado municipal de Grandes Proyectos, Jerónimo Blasco, ha adjudicado desde que llegó al cargo a principios de 2009 un total de 170.000 euros en encargos a dedo vinculados directa o indirectamente con Expo Paisajes 2014. ¿Los adjudicatarios? En buena parte antiguos colaboradores de la Expo 2008, donde el hoy consejero municipal fue director general de Operaciones y Contenidos. El trabajo más cuantioso, de 138.060 euros, se firmó en junio y está destinado a preparar un plan de revitalización de la orla este, donde se quiere organizar la muestra, dedicada a las flores, las plantas y la horticultura.

La oposición, con mayoría en el pleno y que rechaza la organización de este acontecimiento, ha detectado al menos cuatro informes pagados por el Ayuntamiento y vinculados con Expo Paisajes 2014. Dos están relacionados con la supervisión del estudio de alternativas de ubicación de la muestra. Recayeron en el paisajista Carlos Ávila, que trabajó para Expoagua, y en el catedrático y arquitecto Javier Monclús, que coordinó el plan de acompañamiento de la Expo 2008.

El encargo a Carlos Ávila ("Dirección y seguimiento del contrato relativo al estudio de alternativas de emplazamiento e integración urbanística de Expo Paisajes 2014") fue hecho el 1 de julio de 2009 y tenía un precio de 12.020 euros. Por su cuantía, este tipo de contratos de servicios no precisa concurso. El de Monclús, que se hizo por la vía del convenio con la Universidad, tiene un epígrafe parecido: "Dirección y supervisión de los trabajos de estudio sobre alternativas de emplazamiento e integración urbanística de Expo Paisajes 2014". Costó 19.910 euros. Los dos trabajos los pagó la sociedad Zaragoza Vivienda, que está gestionada por Blasco.

Para el tercer trabajo también se evita el concurso público y se utiliza el convenio con la Universidad. Son 138.060 euros para un estudio que también coordina Javier Monclús, por parte de la Universidad. En el equipo multidisciplinar figuran además varias personas cercanas a Blasco, además de Monclús, como el arquitecto Pablo de la Cal, que trabajó para Expoagua, o el ingeniero Juan Antonio Ros, que colaboró en la Expo con la construcción de la noria siria y que ya estuvo con el responsable de Grandes Proyectos en su etapa en la DGA.

El objetivo es elaborar un plan de revitalización de la orla este, con actuaciones como el cierre del anillo verde de San José y Las Fuentes, la solución definitiva para la fábrica de Giesa o la ampliación del parque de Torre Ramona. También prevé la construcción de un parque equipado de 50 hectáreas, donde se podría ubicar Expo Paisajes 2014, y de un plan de acompañamiento, que prevé la recuperación de las riberas del Ebro en esa zona de la ciudad.

Francisco Pellicer, que trabajó como número dos de Blasco en la muestra de 2008 y que actualmente es el director técnico de Expo Paisajes 2014, vio positivo que "haya continuidad", como ocurre en el caso de Monclús, que lleva trabajando en este tipo de proyectos desde 2000. A su juicio, la experiencia en muestras internacionales de estos técnicos "es garantía de la máxima calidad" y subrayó que gran parte del equipo del último convenio con la Universidad no trabajó en 2008. Citó, por ejemplo, a los catedráticos José Luis Palacios o Luisa Frutos, así como al decano de Veterinaria, Jesús García Sánchez, o al de Ciencias Sociales y del Trabajo, Miguel Miranda. Por eso, negó que esté habiendo ninguna clase de trato de favor en la selección de los equipos que trabajan para Expo Paisajes y subrayó el prestigio de todos los profesionales.

También justificó que no se haya recurrido a concursos públicos para hacer estos informes. "En la Universidad había un equipo suficiente y muy bueno. Es una forma de hacer el trabajo por muy poco dinero y dejando los recursos en la ciudad, en nuestra universidad. Es más barato", declaró. Destacó que todos los trabajos se han hecho cumpliendo la normativa, aunque anunció que "lo que se pueda hacer por concurso, se hará", para evitar suspicacias.

Estudio de alternativas

El último informe encargado para Expo Paisajes, el estudio de alternativas de emplazamiento, es el único que ha salido a concurso. Se licitó por 110.432,20 euros y finalmente se adjudicó a la unión de empresas integrada por la consultora Idom y por el estudio de arquitectura Cerouno, en el que trabaja Pablo de la Cal. Para este proceso de contratación se contó con un comité de expertos, en el que participaron Javier Monclús y Carlos Ávila, como codirectores del proyecto. La oferta de Idom-Cerouno era la más cara (92.800 euros), y por lo tanto la peor valorada en ese apartado, pero al final se impuso por las mejoras adicionales que planteó, donde obtuvo la mayor calificación. El informe ya está entregado.