Cuando el tranvía se ponga en marcha, previsiblemente en la primavera del año que viene, las líneas de autobús sufrirán una reestructuración. “Entonces sobrarán autobuses y es posible que se opte por retirar los doce vehículos articulados con los que cuenta la ciudad”, conjeturó ayer Carmen Dueso, concejal de Servicios Públicos. “Es una de las hipótesis con las que trabajamos, pero aún hay que definir la reestructuración”, explicó Dueso, quien también auguró que en 2011 no será necesario adquirir nuevos autobuses. De hecho, estas reflexiones las hizo durante la presentación de ocho vehículos recién comprados, que a partir del martes se incorporarán a la flota gestionada por Tuzsa. Estos nuevos autobuses sustituirán a otros tantos que ya han superado los 14 años en activo y mejorarán el servicio de las líneas 22 y 24.

Desde Servicios Públicos se hace hincapié en que esta adquisición se adelanta más de un mes sobre la fecha prevista y que es la segunda renovación de la flota que tiene lugar en un año, después de los autobuses dobles que se incorporaron a la línea 35 en diciembre de 2009 y que estaba prevista para julio de 2010.

Las nuevas unidades son ‘ecobuses’ (minimizan el nivel de emisiones), de 12 metros, y cuentan con una plataforma baja que facilita la accesibilidad de los usuarios. Asimismo, los viajeros tendrán más espacio en su interior, porque los ‘pasos de rueda’ son más amplios para contribuir a que no haya agobios ni aglomeraciones.

“Son modelos Tata-Hispano, carrozados sobre chasis IVECO Citelis, de piso bajo continuo y con tres puertas de acceso, que incorporan las últimas novedades en cuanto a seguridad, accesibilidad y sostenibilidad medioambiental”, cuentan en el Ayuntamiento.

Otra de sus cualidades es la instalación eléctrica, que dispone de un sistema digital ‘multiplex’, que conecta en un solo circuito todos los cableados. Además, el modelo dispone de un nuevo eje delantero con ruedas independientes, con lo que se mejora considerablemente la estabilidad y maniobrabilidad y se reducen los niveles de ruido y vibraciones.

Precios y abono social

Al margen de las especificidades técnicas de los buses, Carmen Dueso también comentó las propuestas de la oposición sobre la ‘flexibilización’ (a su juicio “generalización”) de los abonos sociales. La concejal desestimó la ampliación de las bonificación del abono de autobús a más parados, al recordar que los requisitos son que estén empadronados en Zaragoza, sean desempleados de larga duración y tengan unos ingresos mínimos requeridos.

“No es lógico saltarse condiciones porque es una medida de apoyo para los más necesitados y no puede ser genérica”, dijo Dueso, al tiempo que insistía en que en las oficinas del Inem se ofrece toda la información a los afectados que pueden acogerse a esta medida. Dueso recordó que este bonobús social se implantó el pasado año tras llegar a un acuerdo con Izquierda Unida y que ya son unos 1.500 parados los que se benefician del mismo.

Sobre la aprobación del precio del billete de autobús para el 2011, desde Servicios Públicos se indica que “habrá que estudiar el informe jurídico para ver qué recomienda” y que “si la nueva tarifa se puede aprobar por el Gobierno de la ciudad, no se hará dejación de funciones”. Si no, tendrá que pasar por el pleno.