Hasta seis parques tuvieron que cerrarse ayer por la tarde en Zaragoza ante el riesgo de que rachas de cierzo de hasta 80 kilómetros por hora produjeran caída de árboles. Policía, Bomberos y Protección Civil clausuraron de forma preventiva los parques de Tío Jorge, Bruil, Castillo Palomar, Pignatelli y el parque Grande, además del de Delicias, que acogía actividades infantiles de las fiestas del Pilar.

En otro recinto festivo, en Valdespartera, se realizaron inspecciones y mediciones de velocidad del viento para que no se produjeran situaciones que comprometiera la seguridad física de los ciudadanos. Igualmente, hasta última hora de la noche se mantuvo la incertidumbre sobre si podría celebrarse la actuación de Carmen París en la plaza del Pilar y la traca fin de fiestas que se lanza desde la arboleda de Macanaz.

Los Bomberos trabajaron ayer a destajo, sobre todo entre las 17.30 y las 19.00, al verse obligados a realizar más de 30 salidas por la caída de árboles, tejas, andamios o materiales de construcción. Entre otras intervenciones, en el paseo del Canal hubieron de retirar unas ramas con una autoescala automática, que también utilizaron -por igual motivo- en el paseo de la Ribera, en la avenida de Ranillas y en la plaza de Santo Domingo. También acudieron al barrio de Valdefierro para retirar un árbol que se había caído en un tendido eléctrico.