Decenas de vecinos de Jaraba llevan más de un año sin ver la televisión

Ayuntamiento y DGA se han comprometido a hacer un estudio y encontrar solución.

José Antonio, un vecino de Jaraba, intenta encender su televisión.
Decenas de vecinos de Jaraba llevan más de un año sin ver la televisión
JESúS MACIPE

Los vecinos de Jaraba llevan más de un año aguantando interferencias, 'pixelaciones' y parones cada vez que encienden la televisión. Eso, los más afortunados. Algunos llevan el mismo tiempo 'disfrutando' de un único 'canal', una pantalla en negro con un aviso que dice: "No hay señal".


Y todo desde que se produjo el apagón analógico. Avisados de que a partir de esa fecha ya no se vería más la televisión convencional, los vecinos de esta localidad empezaron a prepararse para recibir la señal digital: adaptaron sus antenas, compraron descodificadores y más de uno se animó a cambiar la tele. Un gasto que no sirvió de nada. "Al principio pensamos que se trataba de algún problema con el descodificador o con la antena", explica uno de los afectados. "Pero enseguida nos dimos cuenta de que no éramos los únicos", añade.


El alcalde del municipio, Manuel Enrique Pérez, asegura que el problema radica en que, por la situación de Jaraba, emplazada en un valle, la señal que llega es muy débil. "Ya ocurría antes, con la televisión analógica. Por eso, decidimos cablear al cien por cien el pueblo, para poder tener un servicio de calidad de televisión por cable", explica. Desde el Ayuntamiento aseguran que el 80% del municipio tiene contratado este servicio. Sin embargo, ni siquiera los abonados reciben la señal correctamente. "Hay dificultad para ver las cadenas estatales", asegura el alcalde.


No obstante, los vecinos reivindican que no es necesario pagar más de 300 euros por ver la televisión. "Pasamos a encontrarnos en una situación de indefensión y desprotección, no teniendo acceso a la visión de ningún canal, sufriendo un atentado al derecho a recibir libremente información veraz por cualquier medio de difusión". Así lo escribieron en un escrito enviado tanto al Ayuntamiento del municipio como al Departamento de Ciencia, Tecnología y Universidad del Gobierno de Aragón, al que acompañaban 140 firmas.


Las respuestas fueron escasas. En una carta de la empresa pública Aragón Telecom remitida por el alcalde, se decía que "estando disfrutando de este servicio -en referencia a la televisión por cable- no era necesario hacer inversiones en la población relativas a la implantación de TDT".


El pasado jueves se recibió otra carta firmada por el director general de Tecnologías para la Sociedad de la Información de la DGA. En ella, aseguraba que "dado el interés que entraña una correcta recepción de la señal de TDT", tanto el Ayuntamiento como el Gobierno habían tomado las medidas necesarias. Estas consisten en un estudio encargado a Aragón Telecom sobre la calidad de la señal y, si fuera necesario, instalar un sistema de recepción vía satélite para que la TDT pueda ser inyectada en la red de cable o emitida por vía terrestre. Algo que fue confirmado por el alcalde. Sin embargo, los vecinos, tras un año de espera, siguen mostrando su incredulidad.