A menos de un año de las elecciones municipales y autonómicas, los movimientos en el seno del PAR a la hora de tomar posiciones en la elaboración de las listas son más que evidentes. El último tanteo afecta al actual consejero de Industria, Arturo Aliaga, al que sectores de la formación aragonesista quieren colocar como número 1 en la lista al Ayuntamiento de Zaragoza. De este modo, se abriría hueco en la candidatura autonómica ante la posibilidad que apuntan las encuestas de que el PAR sufra un retroceso en las Cortes de Aragón.

El camino que tendrá que superar Aliaga hasta ese momento es largo y, de momento, incierto, ya que la incógnita de los candidatos de las principales ciudades no se despejará hasta finales de año. Hay que tener en cuenta que el portavoz del PAR en el Ayuntamiento de Zaragoza, Manuel Blasco, es uno de los pesos pesados del partido y tiene claro que quiere continuar.

Fuentes consultadas informaron de que la iniciativa se está barajando en el seno del Comité Local del PAR, que controla el sector afín al secretario general y consejero de Medio Ambiente, Alfredo Boné. La intención principal sería permitir que Roque Vicente, responsable del comité intercomarcal de Huesca y hombre de Boné en la Ribagorza, entre en la lista provincial al Parlamento, que en 2007 encabezó Aliaga.

Diversos dirigentes aragonesistas indicaron que la solución contaría de momento con el visto bueno del presidente del PAR, José Ángel Biel, que daría salida electoral al consejero. En cualquier caso, se dejó caer que seguiría siendo una de las apuestas del PAR para formar parte de un gobierno de coalición, sea con el PP o con el PSOE.

Esta solución cuenta con ciertas resistencias en el PAR. Varios cargos públicos consideran que el partido no se puede permitir el lujo de repetir la jugada de José Ángel Biel en 2007. En las últimas elecciones, el presidente del PAR aspiró a la alcaldía de Zaragoza y a la presidencia de la Comunidad, pero ni siquiera llegó a recoger el acta de concejal y le cedió el puesto a Elena Allué. Según fuentes del PAR, este tipo de decisiones pueden minar la credibilidad del partido en Zaragoza capital. "Si Arturo Aliaga es el candidato, debe ser para quedarse en el Ayuntamiento", afirmó un dirigente de la formación aragonesista.

Al margen de esta circunstancia, la estrategia responde también a un descontento del sector de Boné por el posicionamiento político de los concejales del PAR en el Ayuntamiento de Zaragoza, Manuel Blasco y Elena Allué. Según dirigentes del partido, no han logrado marcar una posición diferenciada con el PSOE ni conectar con el tejido social para ampliar el espectro electoral del PAR.

Consideran también que Aliaga tendría "un impacto mediático" más acusado que Blasco, al ser un candidato alternativo a la solución más previsible, que es la de presentar al portavoz y por lo tanto no causar revuelo informativo. En cualquier caso, la mayoría de los responsables orgánicos creen que Manuel Blasco está dispuesto a jugar sus cartas, bien para repetir, bien para encontrar una solución pactada en otra institución.

El juego de candidatos y la búsqueda de mirlos blancos en el PAR es casi una tradición en cada cita electoral, especialmente al Ayuntamiento de Zaragoza. No en vano, el nombre de Aliaga no es el primero ni la primera vez que suena. De hecho, hace unos meses se conoció que el PAR había tanteado al catedrático y antiguo rector de la Universidad de Zaragoza, Juan José Badiola, para que aspirara a la alcaldía de Zaragoza. Ese movimiento no acabó de prosperar porque rechazó la oferta.