CORRUPCIÓN

Prisión para el constructor que intentó sobornar al edil de urbanismo de Ricla

El empresario, condenado a dos años, ha reconocido que quiso comprar al político para edificar en un terreno.

Pedro José Ansó Ansó, de 66 años, ha reconocido que intentó sobornar al concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Ricla, Imanol Arteaga, para que le permitiera construir en los terrenos en los que se planeaba levantar una macrourbanización. La fiscalía pedía para él cuatro años de prisión y una multa de 250.000 por un delito de cohecho, mientras que la acusación particular, ejercida por Isabel Giménez en nombre del concejal de Chunta Aragonesista, solicitaba dos años de cárcel y multa de 450.000 euros.


Al final, un acuerdo entre las partes va a evitar que se tenga que celebrar el juicio, para el que se iba a convocar a un jurado popular los días 5, 6 y 7 de julio. Y no será necesario organizar la vista oral porque el constructor se ha conformado con una pena de dos años de prisión y una multa de 150.000 ?.


Según el fiscal, Ansó, que tiene las empresas Belmur 30 S. L. y Bardají Delicias S. L., se enteró en abril de 2008 que en Ricla se estaba gestando una ampliación urbanística y que se proyectaba construir 1.800 nuevas viviendas, así como un campo de golf. Al ver posibilidades de negocio, "decidió ganarse" al concejal de Urbanismo, con quien se entrevistó al menos en cuatro ocasiones.


El fiscal asegura que sometió al edil a un "auténtico acoso" y que en la última reunión, celebrada el 20 de mayo de 2008 en el polígono de Ricla, le dio un pagaré de 150.000 euros diciéndole expresamente que eran "para él o para el pueblo" y, según dijo, "a cuenta del 3% que suelen pagar de comisión los constructores a las administraciones públicas que les dan obras". Tras comentar el asunto con otros dos concejales y con su tío, denunció los hechos el 22 de mayo.


Al reconocer el acusado los hechos, se desvirtúan completamente sus primeras manifestaciones, cuando llegó a acusar al concejal de urbanismo de "obligarle" a entregarle el dinero. Queda claro por tanto que no lo hizo.


Ansó, natural de Tauste, fue condenado en 1990 a doce años de cárcel por secuestrar en 1983 al hijo de un comprador de cereales de Madrid que había estafado 70 millones de pesetas de entonces a varios agricultores de las Cinco Villas, entre los que estaba él.