"Estoy acabando las maletas para irnos de vacaciones con mi mujer". Luis Roldán se disponía ayer a emprender su primer descanso vacacional con su tercera esposa, la ciudadana rusa Natasha, a la que conoció por internet. El viaje se lo toma como una liberación después de cumplir quince años en prisión, de la que salió el pasado 19 de marzo. Aunque se va al extranjero, el destino concreto es una incógnita. "Prefiero no decir dónde vamos, pero dentro de un mes volveré a casa. De todas maneras, no es el primer viaje que hacemos en estos meses libre", precisa a HERALDO el ex director de la Guardia Civil por teléfono, antes de coger un autobús con destino a Madrid.

Cuando Roldán firmó la libertad y salió del Centro de Inserción Social (CIS) 'Las trece rosas', donde pasó cinco años durmiendo las noches entre rejas, declaró: "No puedo irme porque no tengo dinero". Dos meses después, el político zaragozano va a emprender el viaje más largo planeado desde su fuga de película a París en febrero de 1994 que acabó de manera poco clara con su detención en abril de 1995 en el aeropuerto de Bangkok (Tailandia).

Su vida de jubilado (tiene 67 años) no ha cambiado mucho con la puesta en libertad, salvo que ya no tiene que regresar todos los días laborables a dormir al CIS. "No es muy diferente a lo que hacía antes. La nueva vida es parecida porque hago casi lo mismo", señala Roldán desde su domicilio.

"Salimos por aquí cerca porque suelo ir a ver exposiciones en La Lonja, vamos a andar por el paseo de Independencia, llegamos hasta la plaza del Pilar o nos vamos al parque para sentarnos a leer. Ah, y los miércoles (día del espectador) vamos a ver una película al cine", detalla sus costumbres de hombre libre en los últimos dos meses.

Luis Roldán insiste en que por su jubilación apenas cobra 600 euros mensuales porque el tiempo que estuvo en la cárcel de Brieva (Segovia) no pudo trabajar. Solo tenía cotizados los últimos cinco años que pasó en Zaragoza cuando trabajó en una aseguradora. "Había cotizado antes 30 años, desde 1964 a 1994, pero como la jubilación solo tiene en cuenta lo aportado en los últimos quince años, solo tenía cotizados cinco y así me quedó la pensión", explica el ex director de la Guardia Civil.

Entre sus grandes preocupaciones está ahora el futuro del Real Zaragoza. Aunque suele comprar periódicos los domingos, acostumbra a consultar los medios de comunicación por internet entre semana. "Leí la entrevista del presidente del club, Agapito Iglesias, que salía el sábado", concluye.

El ex director general de la Guardia Civil lleva más de dos meses en libertad, desde que salió del Centro de Inserción Social 'Trece Rosas' de Torrero el pasado 19 de marzo.