PISOS PATERA

Cáritas alerta de que crecen las familias que viven realquiladas en habitaciones

En 93 viviendas se han encontrado 167 salones, dormitorios o pasillos en los que hay varias personas alojadas habitualmente.

Pisos patera, camas calientes y hacinamiento. Ya hace un par de años, Cáritas alertaba de que estos problemas comenzaban a cebarse con algunas familias y, ahora, ha constatado que están aumentando. Un sondeo de la institución benéfica realizado en 107 viviendas en las que ha intervenido muestra que cada vez hay más espacios realquilados en ellas y refleja que, en algunos, no se cumple ningún criterio de habitabilidad.


El director de Cáritas Zaragoza, Carlos Sauras, y el secretario general, Francisco Yagüe concretaron que en el 67,3% de las viviendas analizadas hay espacios realquilados, estando ocupados por extranjeros en la mayoría de los casos.


"Se trata sobre todo de personas extranjeras que se agrupan por diversos motivos, como para compartir gastos, hacer menos gravosa su situación o incluso hemos detectado que, a veces, existen estas situaciones porque hay abusos", explicó Yagüe.


En 93 viviendas en las que encontraron este problema dieron con 167 habitaciones en las que se comparte alojamiento (es decir, en cada una conviven al menos dos personas que no son pareja). En la mayoría (el 44,9%) hay una sala compartida, pero en un 17,8% de los casos existen al menos 2 habitaciones compartidas. Además, en el 21,5% de las situaciones encontraron 3.


El problema de espacio se convierte en uno social de primer orden cuando no se cumplen unos criterios mínimos de convivencia. "En 24 viviendas hemos encontrado 28 espacios distintos a las habitaciones de la vivienda donde se alojan personas. Suelen ser hogares unipersonales que se alojan en el salón, pero también hay parejas con hijos", añadieron. Además, precisaron que en ocasiones se están utilizando pasillos, salas de estudio, recibidores, trasteros o buhardillas para alojar a gente.


Ante este problema -Cáritas insiste en que se trata de una tendencia y en que solo dispone de sus propios datos-, los responsables de la institución pidieron ayer a la Administración que aumente los alquileres de renta baja destinados a familias con recursos escasos, así como que se construyan más módulos familiares en el albergue o que se obligue a la banca a amortizar totalmente los préstamos hipotecarios en caso de embargo.


"Hay un repunte en el número de personas que piden ayuda, muchas tras agotar el periodo de paro, y la iniciativa privada no puede sustituir a la acción de los Gobiernos", aseguró Sauras. Entre otras cosas, denunció los "retrasos inaceptables" que se están produciendo a la hora de conceder ayudas de urgente necesidad a quienes las solicitan. "A veces tardan un mes en dar cita a estas familias y otros tres en concedérsela", denunció.


El doble de ayudas y atenciones


En los dos últimos años (de 2007 a 2009) Cáritas ha duplicado las atenciones que presta a personas y a familias (en concreto, el año pasado ayudó a 5.326 familias). Además, casi ha triplicado la cuantía de aportaciones directas (830.000 euros en 2009 frente a 354.000 dos años antes), siendo muchas para alimentación, sanidad o vivienda.


Sauras destacó que vuelven a recurrir a Cáritas personas que hace años que no lo necesitaban u otras que nunca vivieron en la pobreza. Además, aumentan los solicitantes que tienen menores a su cargo. Es notable el incremento de hombres que agotan sus prestaciones por desempleo y también el de personas que son atendidas aunque están en edad de trabajar.